Por Jesús C. Aguirre Maldonado (Texto y Fotos)—
Delicias, Chih.– Un total de 21 toneladas de apoyos entre víveres, cobijas, dulces, piñatas, ropa invernal y chamarras llevó el Club de Leones Castores de Delicias a Guadalupe y Calvo, donde beneficiaron a un total de 370 familias de las comunidades Cumbres de Durazno y Palmillas, actividad correspondiente al Programa “Ayuda mano a mano a la Sierra Tarahumara”, que cumplió 38 años ininterrumpidos, se informó en rueda de prensa por parte del director Miguel Rodríguez González.
Durante la rueda de prensa que tuvo lugar en el restaurante “Los Santos” de Soriana Mercado, estuvieron presentes además el presidente de la agrupación, Óscar Soltero; Raúl Carmona, presidente del club y Carlos Alvarado, miembro de este club de servicio.
Se entregaron 500 paquetes de sal de 1.5 kilogramos cada uno, 375 bolsitas de dulces, ropa en buenas condiciones, 365 sacos de 25 kilogramos cada uno de frijol y maíz, 507 sacos de 10 kilos de frijol, 421 cobijas, 135 chamarras nuevas para niños.
Toda esa ayuda se llevó en un camión torton que cargó 14 toneladas y en otro rabón con siete toneladas.
La partida a la Sierra Tarahumara se dio el 31 de enero a las 7 de la mañana saliendo en una caravana de nueve vehículos todas camionetas todo terreno, tras recibir la bendición de la Gobernadora del Distrito B 2 Cuquita González, quien les deseó un buen viaje, lo mismo que Raúl Carmona, presidente del club y Clarita quienes madrugaron para darles los buenos deseos y antes de partir todos oraron en círculo a Onoruame Dios padre.
Fueron beneficiadas 370 familias de la Sierra Tarahumara quienes disfrutaron al máximo de la convivencia que les llevaron los integrantes del Club de Leones Delicias Castores, quienes como cada año repartieron toneladas de víveres y compartieron festejos con ellos al romper varias piñatas.
Se informó durante la rueda de prensa que todo esto inició en 1982 por el ya fallecido padre Carta, quien en 1982 les hizo el reto, a lo que antes era el Club Sertoma de Delicias, de que si realmente querían ayudar a la gente más necesitada, no nada más del estado de Chihuahua, sino de todo México, fueran a lo más lejano de la Sierra a buscar comunidades de rarámuris que prácticamente a finales de enero o principios de febrero se están muriendo de hambre.
Esto debido a que lo poco que recolectaron en el verano para subsistir el crudo invierno se les ha acabado.
Por ello a la primera comunidad que fueron hace ya 38 años fue a El Tejaban, por el rumbo de Creel. El padre Carta los acompañó y a los socios que asistieron les impresionó tanto ver las condiciones de vida que lleva la etnia Tarahumara.
El actual director del Programa “Ayuda mano a mano a la Sierra Tarahumara”, Miguel Rodríguez González, que cumplió 38 años de manera consecutiva yendo, desde la primera ocasión, contó que a él le sorprendió en aquella primera visita en 1982 ver a una tarahumara con su niño y sus pies descalzos en la nieve.
Recordó Rodríguez González: “Se me rodaron las lágrimas, al igual que a todos los socios del entonces Club Sertoma de Delicias, quienes nos impactó esta escena. Y desde esa primera vez nos propusimos seguir ayudando a nuestros hermanos tarahumaras de la sierra”.
A través de los años varios sacerdotes de la Sierra los han acompañado viajando con ellos como el padre Juan Manuel Villalobos (QEPD), el padre Celestino Villa y la Tía, una diácono que siempre apoya a los tarahumaras, por mencionar solo a algunos.
También desde hace 22 años la familia Chaparro de Guachochi con José Manuel Chaparro, dueño del aeropuerto, con su conocimiento de toda la Sierra Tarahumara y quien es el que busca los lugares más apartados y necesitados, apoyándolos con sus camiones y consiguiendo apoyos entre sus amigos.
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