EL ARTE DE PERDONAR
Dice en su libro Ignacio Larragañava Del Sufrimiento a la Paz, si supiéramos comprender no tendríamos que perdonar. ¿Comprender? Si, la mayoría de los seres humanos no razonamos, reaccionamos, se podría decir que pensamos por inercia, pensamos nomás porque tenemos cerebro, no le damos el uso para lo que fue diseñado, no razonamos, reaccionamos, un ejemplo: ”me dijo vandejo”, reaccionó y sufro, pero si razono y me digo ”no lo soy”, se equivocó, no me conoce, no es cierto, dijo eso por lo que trae en su cabeza y en su corazón, se lo pudo decir a cualquier otro, yo no soy vandejo, me dijo un amigo: y ¿si soy? A pues le atinó. no hay porque sufrir, aprender a comprender es saber quitarle el poder a las palabras.
Decía el señor Henry Ford creador del automóvil: el hombre ensayará todo con tal de no pensar, por eso comprender, es razonar, es convertir en rosas las espinas que nos lancen, un bello salvoconducto para no tener que perdonar, comprender, ok intentaré practicar la comprensión de aquí en adelante, pero ¿qué hago con los resentimientos que traigo añejos?, ¿cómo los supero? ¿Por qué me es están difícil perdonar??
En mi infancia me enseñaron que confesando mis errores ante el sacerdote y el me ponía un castiguito ridículo ya estaba absuelto, listo para volver a pecar, absuelto igual de patán, pero absuelto, perdonado, libre de culpas, no se me dejaba usar bien el sentimiento de culpa (la culpa) la instituyó Dios para enmendar el camino
Si moralmente me lastima el acto cometido no lo vuelvo a hacer.por eso me era tan difícil perdonar, yo pensaba que si yo perdonaba al agresor lo liberaba de su culpa y no, eso no es cierto, el tamaño del daño seria el mismo, solo que a mi el recordarlo ya no me lastimaría.
En un taller que impartí en un centro de rehabilitación, una señora me dijo: ‘‘yo perdono pero no olvido” no vas a poder olvidar esas emociones son muy fuertes y persistentes, lo que se pretende es que al recordarlas ya no te lastimen, para eso hay que saber perdonar, además es una crueldad con uno mismo traer cosas del pasado para joderme el presente, si el cuerpo tiene más de cinco formas de deshacerse de lo que ya no le sirve: excremento, orina, mocos, cerilla, sudor y otras más, entonces porque no encontrar una acción que nos ayude a deshacernos de lo que ya no sirve para sacar la basura de la mente, y se me hace muy buena opción el de comprender y los hechos ocurridos.
Imagínate un tipo ebrio sentado en una silla, una niña de cuatro años jugando con su triciclo sin querer le tira la botella de licor, el borracho hecho un energúmeno le pega a la niña, la madre de la niña y esposa del ebrio interfiere para que no maltraten a su niña, pero la señora estaba en abrazada y con su niña en los brazos cae al suelo, el ebrio pretende patearla, un joven adolescente hijo de ambos se le hecha encima y lucha con el ebrio mientras la mamá huye con su niña en brazos, el ebrio golpea al adolescente quien se da a la fuga sangrando de su boca, ¿cómo comprender una situación así y no resentirte con nadie para vivir psiquicamente bien?
Bueno veamoslo así: la niñita no sabía lo que iba a suceder, ella andaba jugando, su madre intervino para proteger a su niña y cae, el joven sale a la defensa de su madre al verla en peligro y el ebrio es un enfermo que en ese momento el alcohol era su medicina, la mayoría de la gente peca por ignorancia no por maldad, y ¿cuando me agreden directamente o me insultan? Entonces hay que ver si lo que hacen o dicen no es por venganza de un hecho pasado que yo haya cometido en contra de esa persona o de algún familiar de ella sin intención o con intención, entonces hay que reparar la falta para que no se acumule la basura psíquica, y ¿como? Mi madre me enseñó una regla que la auto nombro la regla del tres y consistía en hacer tres cosas que agraden al afectado: regalarle un pastel, una rosa, una blusa de su color preferido, son tres cosas que agraden y ¿si así no me perdona? Tu limpiaste tu lado de la calle, devolviste tres cosas buenas por un daño, hay que recordar que al soberbio le cuesta mucho trabajo pedir o dar perdón
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