Necesitamos un(a) mandatario conciliador, que privilegie la negociación y el consenso con las instancias con las que se debe coordinar, como son el Ejecutivo federal y los presidentes municipales, además del Poder Judicial y Legislativo, tareas que el gobernador Corral no logró realizar por su carácter irritable, irascible y frívolo
El 2021 se llevarán a cabo elecciones federales y estatales, el proceso electoral ya ha iniciado;los partidos mueven sus cartas, se organizan, y el juego democrático se impulsa por cada instituto político. Si bien los registros se realizaran hasta el próximo año ya varios precandidat@s se han destapado y están trabajando con sus militancias para acceder al poder,dependiendo de varios factores como son las alianzaso el “consenso”.
El partido que está haciendo más visible el desarrollo de su proceso es Morena, desde la renuncia del delegado de los programas sociales Juan Carlos Loera, quien ha mostrado su intención de contender, o destapes de otros personajes nacionales como son los casos del empresario Rafael Espino, los senadores Berta Caravedo y Cruz Pérez Cuéllar, la diputada suplente Carmen Almeida, y también otros que han mostrado sus intenciones de contender como ha sido el profesor de la UACJ Víctor Quintana Silveyra.
En cuanto al PAN, Gustavo Madero ya pidió permiso para dejar el Senado, mientras que la alcaldesa de la ciudad de Chihuahua María Eugenia Campos ha mostrado sus intenciones para participar, aunque todavía no deja el cargo. Carlos Borruel, que se registró de última hora al vencimiento del plazo para inscribirse por la contienda a la nominación del blanquiazul.
Por el PRD, Pavel Aguilarse inscribió como precandidato eventualmente único a la gubernatura por ese instituto político.
Hay destapes en otros partidos mientras que porla vía independiente no hubo pronunciamientos, salvo un intento de Jaime García Chávez que no prosperó.
Los plazos se vencen y Alfredo Lozoya se perfila para contender por un partido político Movimiento Ciudadano, el alcalde de Ciudad Juárez, Armando Cabada, ha manifestado sus intenciones de participar e incluso se inscribió en Morena. Este es el contexto de la lucha por la gubernatura y aunquehay otros puestos en disputa que se decidirán hasta el mes de enero o febrero, por lo prontolas principales actividades son la lucha por las candidaturas a la gubernatura.
¿Qué debemos esperar las y los ciudadanos de los candidatos? Desde luego que mucha eficacia, honestidad,dentro de esto, combatir la demagogia, y se eviten las demandas judiciales, pero, sobre todo, austeridadya que el estado se encuentra sumamente lastimado, en bancarrota, endeudado.
Necesitamos un(a) mandatario conciliador, que privilegie la negociación y el consenso ante las dos las instancias con las que se debe coordinar, como son el Ejecutivo federal y los presidentes municipales, además del Poder Judicial y Legislativo, tareas que el gobernador Corral no logró realizar por su carácter irritable, irascible y frívolo, ya que toda su administración se la pasó peleándose con todos los poderes públicos. Se requiere de un gobernante que reúna, características positivas y asertivas para hacer avanzar a Chihuahua.
De los precandidatos actuales, no todos van a llegar obviamente a participar en la contienda electoral. Cruz Pérez Cuéllar enfrenta una demanda de desafuero por presuntos actos de corrupción, al igual que la alcaldesa de Chihuahua Maru Campos, en cuyos casos el proceso se va judicializado. Están las sospechas de corrupción entre ambos, que son acusados de haber recibido dinero del exgobernador del estado hoy preso, César Duarte.
Queremos un(a) gobernador que escape de este tipo de procesos, y aunque no sabemos el resultado final de los juicios que está promoviendo el Gobierno el Estado, desde ahí ya hay un elemento que nos hace ver que la honestidad está en duda: el gobernante que quede debe evitar cualquier sospecha que ponga en cuestionamiento su honorabilidad.
En cuanto a los demás contendientes, si bien es cierto no enfrentan procesos penales, Juan Carlos Loera ha recibido varios ataques, sin embargo, hasta el momento no existe una denuncia de manera formal en su contra, interpuesta ante las instancias judiciales. Lo mismo pasa con los demás candidatos, excepto en los casos de Cabada y Pavel Aguilar, ambos señalados de estar involucrados en los sobornos de César Duarte. Cabada ya lo aclaró y lo acepta, tras acogerse a la figura del criterio de oportunidad que le permitió regresar más de cuatro millones de pesos que le fueron otorgados como pago de algunos eventos.
No obstante, de que cuatro de los precandidatos están presuntamente involucrados en los sobornos de la nómina secreta, que de secreta que ya no lo es tanto, el proceso continúa con la apertura de las precampañas.
Considero que desde que se descubrió la nómina secreta, en ese momento se debió de actuar en consecuencia, pero no se hizo y a las y los interesados en contender se les permitió proseguir, por lo que la caracterización de estas precampañas y seguramente las campañas –ya cuando estén definidos los candidatos–, enfrentará la percepción popular de que varios de ellos estuvieron involucrados en actos ilícitos.
Y aunque es posible que por el manejo de los deslindes para contrarrestar las demandas las y los acusados puedan salir librados, la ciudadanía finalmente podría quedarse con la impresión de que ‘todos los políticos son lo mismo’, ‘que ganará el menos peor’, y lo que sería más grave aún, con la percepción de que la corrupción sigue formando parte del sistema político. Ojalá que quien resulte electo como nuevo gobernador de Chihuahua fuese quien no estuviera involucrado en este tipo de actos, pero que además demostrara eficacia y austeridad. Es difícil lograr ese resultado, pero no imposible.
***
Víctor García Mata. Profesor de la UACJ, con grados académicos de doctorado en Investigación e Historia y licenciado en Ciencias de la Comunicación.
Últimos comentarios