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Crónica de una ríspida discusión en el Congreso…por Javier Quiñones

SE TRENZAN PRIÍSTAS Y PANISTAS POR LA PLACA DE MARISELA

Chihuahua, Chih. A 10 de marzo.- La tediosa sesión del Congreso local se animó este jueves cuando subió a tribuna la diputada del PAN Inés Martínez Bernal.

Antes, las fracciones unidas del PRI, PRD y PANAL habían paseado ante el pleno su mejor victoria: un exhorto “a la Secretaría de Relaciones Exteriores para que emita una Nota Diplomática y  a la Cámara de Senadores del H. Congreso de la Unión para que fije una postura enérgica en que se manifiesten la indignación del pueblo chihuahuense y el de México por la operación del programa Rápido y Furioso”.

Ostenta esta iniciativa las firmas del expositor Gabriel Flores Viramontes, César Tapia Martínez y Héctor Barraza Chávez. Mas no la del coordinador del PAN.  Aunque hacia la misma hora, a muchos kilómetros de distancia, en la Ciudad de México el panista Ricardo García Sainz expresaba su muy patriótica indignación mediante un conato de llanto…

La coincidencia más notable entre los legisladores federales de todos los partidos y los chihuahuenses del PRI, PRD y PANAL residió sin duda en la ausencia de un debate auténtico. Ni la obvia asimetría entre el derecho de los gringos a armarse para defender su hogar y patrimonio, y, la acotación por la SEDENA de tal derecho entre los habitantes de México; ni tampoco la posibilidad de una irresponsabilidad específica del gobierno mexicano al no impedir el contrabando de 2000 armas; no, ninguna hipótesis diversa del patriotismo pudo despertar la curiosidad de nuestros cicerones.

“El gobierno de Estados Unidos siempre ha tenido una doble moral en su política exterior”, afirma la iniciativa.

Exagera al límite guerrerista lo de “Rápido y furioso”, así: “Violando flagrantemente el gobierno de Estados Unidos la soberanía de nuestro país una vez más”.

Por esa ruta, el raciocinio queda ahogado sin remedio entre sentidos efluvios nacionalistas.

MUJER VS. MUJER

Todo cambia sin embargo con la intervención de Inés Martínez ante el Congreso de Chihuahua.

No sube por cierto Inés para condenar la operación “Rápido y furioso”, sino para censurar la decisión de César Horacio Duarte Jácquez, el gobernador, de desprender de los muros del Palacio de Gobierno la placa conmemorativa del asesinato impune de Marisela Escobedo.

“Los ciudadanos están lastimados; no puede la autoridad ser tan insensible; esa placa no ofende” –empieza diciendo.

Insinúa: “Recuerden que las veladoras que rodeaban al Palacio de Gobierno desaparecieron; después de muchos reclamos, reaparecieron para ser destrozadas a pesar de que este edificio está custodiado y vigilado las 24 horas del día”.

Compara e ironiza: “En el 2001, un 17 de enero, el ex gobernador Patricio Martínez sufrió un atentado, y nos lo recuerda una placa adherida a los muros del Palacio; ¿ahí no se lastimó el patrimonio cultural de los chihuahuenses?”.

Del bando del gober le salta otra mujer: Lisa Aguilera. Expone esta la interpretación oficial del repudio de Duarte a la placa de Marisela:

-Nunca ha habido insensibilidad, no hay cerrazón; nosotros nos solidarizamos con la víctima. Pero antes que todo le apostamos a la cultura de la legalidad” -refuta la priísta. Completa:

-Y a la preservación del patrimonio cultural.

DIALÉCTICO MATERIALISTA

Entonces tercia un hombre. Es Héctor Barraza, del PRD. Muy filosofante, el diputado izquierdista quiere navegar por el justo medio.

Comienza exculpando las decisiones de desalojar las veladoras y expulsar la placa: “Yo he sido testigo de la buena voluntad del gobernador”.

Concede enseguida alguna razón a los críticos de Duarte: “Hay heridas profundas que no se van a borrar con el simple hecho de retirar veladoras; no debe coartarse el derecho de nadie y mucho menos en la casa de todos; exijo la presencia del fiscal para que nos explique el curso de las investigaciones”.

Da un giro sorpresivo: “Querían obligar (los mariselistas) a los visitantes que van a ver los murales a escuchar su explicación de lo que había pasado allí”.

Y termina -muy dialécticamente- otra vez del lado de Duarte: “Yo creo en el gobernador del estado”.

FUEGO CRUZADO

El debate se prende.

La defensa del ganadero parralense corre ahora a cargo del dueño de Antena 7, Ricardo Boone.

La preocupa sobre todo al empresario la “imagen hacia el exterior que nos quisieran dar” y propone a modo de remedio “un diálogo entre las organizaciones de la sociedad civil y el gobernador”. Al cabo, nos culpa a todos del crimen de Marisela:

-Debemos preguntarnos qué responsabilidad tenemos como sociedad; es fácil responsabilizar al gobierno, pero la responsabilidad la tenemos nosotros mismos -postula el priísta.

Le responde Alejandro Pérez Cuéllar, del PAN. Dispara primero:

-La cultura de la legalidad empieza con el respeto a la vida de los chihuahuenses.

Redobla su arremetida: “Ya van dos meses y todavía no tenemos un informe claro de la fiscalía”.

Y asalta a bayoneta calada: “Retirar la placa es un mensaje muy negativo; el gobierno de Duarte no permite la placa pero sí permite asesinatos en la puerta del Palacio”.

COLOFÓN

El diputado Alejandro Domínguez, del PRI, lanza un contraataque desesperado: compara las decenas de miles de crímenes mortales registrados durante el sexenio del presidente Calderón con el asesinato ante cámaras de Marisela. Se burla:

-Es como si quisiéramos poner 34 mil placas en los muros de Palacio Nacional.

Inopinadamente regresa Barraza al podio para balconear ¡a los perredistas!:

-Yo en lo personal he sido objeto de críticas al interior de mi partido porque dicen que aquí no se oye una voz del PRD…

Mas es demasiado tarde para cortinas de humo. Toca al panista deliciense Jaime Beltrán del Río izar la bandera azul:

-No debemos romper el esquema de armonía –parece conciliar. Pero no deja escapar la presa:

-Es justo hacerle llegar al gobierno del estado un señalamiento de que no estamos de acuerdo con el retiro de la placa.

De despedida, clava al cabo una banderilla al soldado Domínguez:

-No hubo 34 mil asesinatos a la puerta de Palacio Nacional…

Sin duda ninguna, este debate sí lo ganó el PAN.

Algo es algo.

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