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La observación de hechos no es percepción de realidades…por Aída María Holguín

En materia de seguridad pública, es poco serio jugar con las estadísticas y considerar un “logro” la disminución en la percepción que los ciudadanos tienen de este problema, mientras las cifras siguen su galopante incremento –o a lo más, se mantienen iguales–, independientemente del manejo oficial que de ellas se haga.

Hace apenas unos meses, el gobernador del Estado, César Duarte Jáquez, aseguraba que existían estudios de mercado por parte de casas de opinión en donde se señalaba que la percepción de seguridad en Chihuahua aumentó.

Por otra parte, y con fecha más reciente, el Observatorio Ciudadano del Delito, a través de un ejercicio metodológico para comparar las cifras de la Fiscalía General del Estado y la Dirección de Seguridad Pública Municipal; y con ello, dar más certeza a lo que sucede realmente, ha evidenciado que existe una diferencia notable entre los datos que ofrecen ambas instancias.

Este mal manejo de cifras delictivas; se debe en gran parte –según el Observatorio– por falta de denuncia.

Considerando todo lo anterior y lo que como ciudadanos vemos, vivimos y percibimos, el hecho de que se quiera hacer creer a la ciudadanía que los delitos disminuyen; y por ende, la percepción de seguridad aumenta, está muy alejado de la realidad ya que una cosa es que disminuyan los delitos, y otra muy distinta es que no se denuncien y no se registren como parte de las estadísticas.

Tan solo por poner dos ejemplo de los datos expuestos por el Observatorio Ciudadano, y que trascendió en los medios de comunicación, es que el registro de delitos en robos a casa habitación por parte de la Dirección de Seguridad Pública es de mil 823 incidentes de enero a agosto; sin embargo, la Fiscalía General del Estado reporta sólo 404 delitos. Esto se debe a que la ciudadanía no confía en la autoridad, por lo que las solicitudes de apoyo se quedan sin la correspondiente investigación.

Así mismo, el Observatorio dio a conocer que en lo que de enero a julio de 2011, la cantidad de homicidios dolosos es de 1919, mostrando un promedio diario de 9 decesos por este motivo. Dato que contrastaron con los 10 homicidios diarios que se registraron en 2010 y los 6.6 que sucedieron en 2009.

Cabe señalar, que mientras que César Duarte en ningún momento explicó la metodología usada en esos estudios de mercado con los que asegura que la percepción ha cambiado, la información que analiza el Observatorio Ciudadano del Delito, corresponden a datos que fueron obtenidos a través de las áreas de transparencia del Gobierno Estatal, habiendo solicitado datos desglosados correspondientes al estado y los distintos municipios, así como las cifras del municipio a través de la Dirección de Seguridad Pública Municipal.

De acuerdo con la definición de la Real Academia Española (RAE); observar, es examinar atentamente; la percepción, es una sensación interior que resulta de una impresión material hecha en nuestros sentidos; la probabilidad, es la razón entre el número de casos favorables y el número de casos posibles; y estadística, es la rama de la matemática que utiliza grandes conjuntos de datos numéricos para obtener inferencias basadas en el cálculo de probabilidades.

El caso es que mientras que el gobernador dice que la percepción –la sensación– que se tiene de Chihuahua es que la inseguridad disminuye, el serio análisis del observación hecho por un grupo organizado de ciudadanos y el día a día de los chihuahuenses, nos dicen que la probabilidad de ser víctimas del crimen –organizado o no–, nos harán formar parte de las estadísticas, las contabilicen o no las contabilicen.

La realidad incuestionable se asienta a través del Guerrero japonés, reconocido como uno de los mejores guerreros Samurái de todos los tiempos, Miyamoto Musashi: “La observación y la percepción son dos cosas separadas; el ojo que observa es más fuerte, el ojo que percibe es más débil.”

Aída María Holguín Baeza     Correo: laecita@gmail.com

Artículos anteriores: laecita.wordpress.com

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