Es de tomarse en cuenta que al parecer las elecciones 2012 estuvieron regidas por la frase Maquiavélica: “El fin justifica los medios”, pues a todas luces se trató de un proceso que no fue ni limpio, ni transparente, ni justo, mucho menos equitativo y después de un conteo rápido totalmente amañado, al contarse 7 mil 600 casillas de 136 mil instaladas, dieron el resultado: el 37.93 al 38.55 por ciento a favor de Peña Nieto, 30.90 al 31.86 por ciento a favor de López Obrador y el 25.20 al 26.03 a favor de Vázquez Mota, y que se apresuró a darlo a nivel nacional y en todos los medios de comunicación, el mediocre consejero-presidente del IFE, el omiso Valdés Zurita adelantándose 30 minutos a lo programado sin esperar las cifras del PREP, que a esa hora se iniciaba. No hay que dejar de observar que también algunas otras frases de la sabiduría popular quedan como anillo al dedo a este fraudulento proceso electoral:
La unión hace la fuerza.- Ante la desgracia vivida por el partido en los dos sexenios pasados en que Labastida Ochoa y Roberto Madrazo fueron vencidos por Vicente Fox y Felipe Calderón, respectivamente, ha sido el equipo de Carlos Salinas, conformado por el propio Labastida, Beltrones, Rojas y Elba Esther, entre otros, el que logró la unión, cuando se preveía que de nueva cuenta que la llegada al poder podría estar perdida.
En la guerra y el amor, todo se vale.- Al que el partido parece agregar: “En la política también” y se podría combinar incluso con aquel refrán que versa: “Con dinero, baila el perro”, pues como nos han dejado claro, en la política el dinero todo lo puede, hasta manipular a los mas pobres y necesitados, comprándole por unos pesos, su voluntad, su dignidad y su voto. El PRI ya admitió haber invertido mas de 66 millones de pesos en tarjetas de recompensa de Monex, para comprar votos, de más está decir entonces, que seguimos siendo un país del tercer mundo, de conformistas que habiéndonos “salido del carril” por doce años, como no funcionó, preferimos regresar a lo mismo, guiados por la idea de “más vale malo conocido, que bueno por conocer”, un país de masoquistas, faltos de memoria y además el hazme reír del mundo, un pueblo ignorante y sin carácter, ya que si bien es un hecho que el voto fue inducido y manipulado, por las “recompensas” es una realidad también que no fue vigilado y los “vendidos” bien hubiesen podido votar por algún otro candidato.
Tengamos muy presente, que la democracia tan cantada, no es más que un mito y una ilusión que se quedó en los doce años del panismo ineficiente y corrupto, fue solo un intento de incipiente democracia y no nos sorprendamos, no nos quejemos tampoco por favor, al ir descubriendo que la que impondrá el nuevo gobierno peñista, será una democracia dirigida, de publicidad, comprada y metida a fuerza a mayoría de los mexicanos.
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