—Por Laura Matus—
Tuxtla Gutiérrez, Chis.- Una reflexión colectiva en torno a la pregunta de ¿por qué se lee menos cuándo hay más opciones para hacerlo?, se generó en el panel “La lectura en la era del internet”, realizado en el marco del Día Mundial del Libro, en la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (UNICACH).
En dicho panel expusieron sus visiones en torno a los libros y su lectura, en el contexto de esta era tecnológica, los docentes del Centro de Estudios Superiores en Artes (CESA), Rubén López Roblero, René Correa Enríquez y Rolando Mazariegos, así como el director del Centro Universitario de Información y Documentación (CUID), Noé Gutiérrez González.
Durante este evento al que asistieron alumnos y docentes del CESA, el rector de la UNICACH, Roberto Domínguez Castellanos, indicó que el Programa Editorial de la universidad genera anualmente entre 40 y 60 títulos diversos, que surgen principalmente del trabajo académico de los docentes.
Además la universidad edita las revistas Liminar, Lacandonia, Artes y Pobacmá, que son de carácter científico y literario con altos estándares de calidad, por lo que el rector alentó a los docentes a trabajar en pro de la lectura, pues es una herramienta valiosa en la formación profesional del estudiantado.
El docente Rubén López presentó con base en estadísticas nacionales un panorama respecto a la lectura en México, país que en el que sus habitantes leen en promedio al año 2.9 libros, y uno de cada cuatro no tiene libros en su casa, ni han visitado una librería y solo el 7 por ciento de la población señala que lee porque le gusta mucho.
Los jóvenes actualmente han desarrollado habilidades en el manejo de mensajes con ayuda de nuevas tecnologías, pero no están desarrollando la capacidad de entender lo que leen y escriben en el nivel universitario, apuntó de la investigadora argentina, Paula Carlino.
Noé Gutiérrez dijo que la UNICACH cuenta con 14 bibliotecas en Tuxtla Gutiérrez y sedes regionales, a las que regularmente los estudiantes acuden en busca del material bibliográfico requerido para su formación, pero escasamente consultan otro tipo de libros.
El docente Rolando Mazariegos dijo que los libros son más que una extensión de la imaginación, también lo son de la memoria, proporcionan herramientas, cualidades nobles, conocimiento y propician el desarrollo de la sensibilidad.
René Correa Enríquez invitó a los jóvenes asistentes acercarse a la lectura, pero no por obligación, “hay que leer para la vida”.
Actividades como está se enmarcan en las políticas contempladas en el Plan de Desarrollo Institucional (PDI), para favorecer la formación integral del estudiantado.
Noticias/Tribuna Chiapas
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