En marzo de 1991 termino el rodaje de una interesante película de Juan Fernando Pérez titulada igual este escrito, brillantemente protagonizada y dramatizada por Eduardo Palomo, José Carlos Ruiz y Claudia Guzmán; Se trata de un profesionista recién egresado, el cual arriba a un pequeño pueblo aislado de la civilización con la finalidad de efectuar su compulsorio servicio social y mediante su conocimiento y contactos trata de ayudar a los pobladores a mejorar sus métodos y técnicas de producción agropecuaria, elevando sus niveles productivos en beneficio de generar una mayor derrama económica y por ende elevar el nivel de vida de los mismos.

En un principio los campiranos se muestran renuentes a aceptar su ayuda y asesoría profesional por la razón principal de toparse con  una arraigada, tradicional y arcaica mentalidad, por creer que sus rústicos métodos funcionaran por siempre mejor, rehusando cualquier cambio o innovación; eventualmente logra ganarse la confianza de los pobladores, aceptando utilizar metódicamente nuevas tecnologías, introducir variedades genéticamente mejoradas, establecer una beneficiosa rotación de cultivos y establecimiento de líneas de créditos agropecuarios con instituciones oficiales, eliminando los tiburonezcos contratos con los bancos locales, a menudo controlados por los caciques regionales. Aquí es donde comienza su mayor obstáculo, ya que se topa de frente con los grupos de poder que controlan casi a placer la voluntad de los pobladores, mismos que son víctimas continuas de la intimidación por parte de los caciques y las autoridades locales, los cuales presionan, amenazan y obligan a una aceptación casi absoluta de explotación totalitaria. Al organizar, asesorar legalmente  a los campiranos y despertarlos de ese letargo en el que se encontraban, despierta también la ira de los ambiciosos, soportando toda clase de presiones que eventualmente llevan a un levantamiento general en contra de los explotadores, el cual desafortunadamente termina con la vida de los líderes campesinos y en Ingeniero Cruz, el extensionista.

Esta es sin duda, es una real y conmovedora historia, la cual desgraciadamente se repite una y otra vez en el ámbito del agro mexicano, ya que el profesionista honesto y con voluntad de ayudar pone toda su devoción, energía y conocimiento para sacar adelante a un grupo de humildes campesinos, los cuales una vez concientizados afrontan junto con el profesionista problemas con cacicazgos y el sector burócrata gubernamental, a quienes muy poco les importa el mejoramiento del agro y los mismos campiranos, en un sistema que solo apoya y le da la razón a quien está dentro de el, o bien pertenece a la misma clase adinerada y con poder e influencias políticas.

Sin duda alguna que la mayor parte de los colegas, incluyéndome yo mismo, mas de una vez en la vida hemos tenido que ser Extensionistas, sin importar el titulo o la descripción del trabajo que nos ha tocado realizar, y lo digo por conocimiento del desempeño profesional de varios de ellos, entre los que vienen a mi mente el colega Mario Aguilar al luchar contra la mentalidad arcaica al tratar de establecer variantes en los sistemas de manejo Forestal, el colega “Cury” Díaz Ríos al luchar contra el sistema bajo las mismas circunstancias en el sureste Mexicano, Los colegas Javier Negrete y su hermano, Germán Acosta, mi paisano Antonio Hernández “El golondrino” solo por mencionar algunos, aunque son miles y miles que espacio faltaría para mencionarlos.

Yo personalmente recuerdo desde mi trayectoria en la prestación de Servicios técnicos Forestales, en la investigación como profesor-Investigador del Centro Regional de Chapingo, hasta mi breve paso por la PGR cuando al entrar a las más remotas poblaciones de diversas áreas del país, no obstante de aplicar parte de los conocimientos técnicos Forestales, era menester también utilizar los acumulados la vida en mi tal vez limitado conocimiento sobre agricultura, zootecnia y qué decir de los obtenidos en la Universidad a mi paso por la facultad de Biología, y los bien aprendidos cuando por petición propia y avalado por estatutos de la ley orgánica entonces vigente se me permitió asistir paralelamente por un periodo de casi 3 años a la facultad de Medicina “Dr. Ignacio Chávez” en Morelia. No pude jamás culminar mi sueño de ser médico, ya que en ese entonces ya apoyaba económicamente a mi padre con las carreras de mis otros hermanos, y la culminación y titulación como Biólogo era relativamente más corta y económica que el hacerlo como médico; quizá en mi otra vida pueda llevar a cabo ese sueño.

Durante ese periodo me toco aparte de la labor de trabajo básica, en innumerables ocasiones atender también desde la atención a problemas estomacales sencillos, fracturas, luxaciones y esguinces, disenterías crónicas, infecciones generales, gripas y calenturas, hipotermias, un sinnúmero de hemorragias por diversas causas, dolores de cabeza y otros similares por medio de digito puntura, hasta la atención inmediata de 5 partos en ese periodo. Y todo por la falta de atención medica local.

A menudo también proveer algo de consejería personal o familiar por medio de psicoanálisis, o de vez en vez  la utilización de las artes marciales para disolver alguna disputa seria o hasta un consejo personal formó parte de toda esa labor como un verdadero extensionista, creo yo.

Total, que llegue a ganarme a pulso la confianza y el cariño de los campiranos, cosa que no era muy bien vista por los caciques locales y mucho menos por mis superiores en turno; pero más que el sentido de la disciplina, el temor a represiones o amenazas, podía más el instinto de querer ayudar y apoyar al necesitado, ya que de una u otra forma provenía yo de ese sector de población necesitada. Y las represalias, ataques o amonestaciones no se hacían esperar. Ni hablar… gajes del oficio.

Pasando a un tema homologo al que nos ocupa, tras conocerse la renuncia del máximo jerarca de la Iglesia católica, el cardenal alemán Joseph Ratzinger, mejor conocido como el papa Benedicto XVI, hecho que tomo a todo mundo por sorpresa por lo repentino, rápido e inmediato,  la cual según fue causada por problemas de salud, cosa que no convenció a todo mundo, especialmente por el hecho de que tal pareciera que el aludido llevara prisa por irse, rompiendo con todos los protocolos del vaticano tratando imponer una obscura cortina de humo que cubriera de cierta forma las verdaderas razones de esa “voluntaria renuncia” que mas bien se antoja a una salida forzada orquestada y ordenada por los altos jerarcas del Vaticano.

No eran pocos los hechos escandalosos atribuidos al mismo desde que era encargado del área jurídica del Vaticano, que incluían su apatía mostrada cuando de investigar se trataba, para castigar o procesar a los múltiples casos de abusos sexuales por parte de sacerdotes, incluso había pruebas documentadas que muchos de ellos fuero encubiertos y hasta protegidos por su respectiva diócesis, avalada obviamente por el susodicho; como ejemplos, solo en los Estados Unidos existe una larga lista en los juzgados de California encabezada por Gregory Kareta, Philip Kavanaugh, Chistopher Kearney, John Keeney, Matthew Kelly, etc., etc. de un archivo de cientos de páginas con las denuncias establecidas y con amplia documentación y evidencia, procesadas en los juzgados correspondientes, desgraciadamente con los mismos resultados todas: NO ACTION TAKEN en ingles, lo cual traducido al buen castellano significa, sin acción legal o sin efecto, y lo peor de todo que muchos de ellos siguen refugiados en la obscuridad de una parroquia en la cual solo ha cambiado el lugar geográfico de la unión americana o a veces hasta el país.

No hay que olvidar los casos acontecidos en México con Marcial Maciel y otros más protegidos y hasta ensalzados por Norberto Rivera y tantos casos más. Y Benedicto XVI? Bien, gracias, más enfocado turisteando por el mundo, en sus pleitos de comadres con los musulmanes radicales o satanizando a los homosexuales o a opositores ortodoxos a las filosofías básicas de la iglesia católica.

Definitivamente que su labor dejaba mucho que desear; para nada el líder que su gremio necesitaba, especialmente es estos tiempos de desbandada de feligreses católicos… tal vez por eso la mafia del vaticano le ordeno al papa, más que recomendar, su renuncia con carácter de irrevocable. Todo ello provoco un caos mediático e incertidumbre entre los católicos, en especial porque aparentemente no había candidato adecuado, ya que muchos de los miembros del conclave o elección papal tenían múltiples antecedentes como protectores de pederastas. Pero algo divino ocurrió por ahí y lo digo por lo siguiente: El elegido fue el cardenal argentino Jorge Mario Bergoglio, a quien por sus características le daban pocas oportunidades de ser electo.

Usualmente soy escéptico en aspectos relacionados con la religión o sus aspectos normativos, por la razón de que tengo siempre a bien separar entre el ser divino y el ser humano.

Personalmente experimente una agradable sorpresa al conocer un poco más de este limpio hombre, que tan solo al adoptar su nombre oficial demostró su humildad: Francisco. Este líder ha mostrado en cada uno sus actos una honestidad y entereza muy poco mostrada por sus previos antecesores, quizá con excepción de Juan XXIII y Juan Pablo II.

Se ha bajado del pedestal aislado en el que sus antecesores habían echado raíces, dándose aureola de seres divinos, inaccesibles, arrogantes, el cual era intocable y de acceso casi imposible por parte de los feligreses, y todos sabemos que esas aptitudes son contrarias a las mostradas Por Cristo. Hace además recorridos a pie, utilizando a menudo un carro descapotado o el trasporte público, prescindiendo de la treintena de guardaespaldas que evitan hasta el paso del viento. En cada uno de sus discursos hace hincapié en la acción inmediata para los más  necesitados, incluso ofreciendo recursos económicos del vaticano; estas acciones de humildad y honestidad lo hacen un verdadero EXTENSIONISTA también… cosa que lógicamente no es bien vista por la mafia del vaticano. Mas que sentirse uno sorprendido por la actitud de este hombre, a mí en lo personal me preocupa… solo hay que recordar el destino del entonces electo papa de tan solo 65 anos Albino Luciani, mejor conocido como Juan pablo I, el cual tan solo presentar su proyecto de apertura del vaticano, revolucionario, renovador y altruista fue censurado por la misma mafia, la cual no pudo convencerlo de retractarse, al fin, la elección estaba consumada y el seria a el próximo papa por los próximos anos… hasta que muriera… y paso lo inesperado… misteriosa y sospechosamente amaneció muerto la  mañana del 28 de septiembre de 1978, tan solo a 33 dias de haber iniciado sus funciones; jamás se dieron resultados concretos anatomicos y funcionales de la autopsia por ser dizque secreto canónico. Tan solo se dijo que había muerto por un paro cardiaco causado por arritmia e hipertensión arterial, lo cual sorprendió a todo mundo, ya que en sus archivos médicos no existían antecedentes de tales disfunciones; No se necesita ser un experto en medicina forense o criminalística para inferir que algo muy raro paso aquí, pero como todo en el vaticano es totalitario, secreto e intocable, tuvimos que tragarnos y  aceptar la versión oficial, como siempre suele suceder cuando hay algo turbio y sucio por ocultar. Ya cuando fue electo Carol Wojtyla o Juan Pablo II, le “leyeron la cartilla” y con gusto acepto las condiciones, ocupando el cargo hasta su muerte por causas naturales.

Aquí lo preocupante es que, dados los antecedentes y la forma de “trabajar” de los jerarcas del Vaticano,  existe el alto riesgo que al actual papa Francisco puede pasarle lo que a Juan Pablo I, y todo por ir contra los rígidos y arbitrarios estatutos de dicha organización. Ojala y quienes percibimos las cosas de ese modo nos equivoquemos. A propósito de esto, en mis casi 50 años de vida, nadie ha podido contestar satisfactoriamente cuando pregunto, porque la santa sede está en Roma, cuando que la ciudad santa y el lugar de nacimiento y desarrollo de Cristo fue en Israel..

Ni hablar, al llegar a su decadencia total, el antiguo imperio Romano algo de gran poder y control tenía que conservar, y que mejor si era la parte más lucrativa; aun recuerdo cuando en mis años mozos al exponer esta teoría casi me queman en leña verde los párrocos de mi pueblo.

Es por ello que el actual papa despierta en mi una gran simpatía y admiración, porque al parecer está dispuesto a servir sin los ridículos protocolos del vaticano, bajarse del “Trono de San Pedro”, tallado con piedras preciosas, oro macizo y marfil, recordándonos la mística y altruismo de un EXTENSIONISTA, tal y como muchos de nosotros lo fuimos, luchando contra todo y contra todos, a pesar de poner en riesgo nuestro empleo, nuestro futuro profesional y quizá hasta nuestra propia vida…

SALUD COLEGAS!!