Delicias.- Maribel Vázquez Ramírez, con tres hijos de 12, 8 y 4 años de edad es una de las tantas madres solteras que hay no solo en Delicias, el Estado y el país, pero ella “no se achicopala, ni se agüita”, pues dice que el trabajo honrado no debe ser motivo de vergüenza y mucho menos para ella que con la venta de burritos por las calles de la Zona Centro ha salido adelante en la manutención de su hijos.
Chiquita, chaparrita, y mujer, pero con unos deseos enormes por seguir luchando por la vida y llevarles el sustento diario a sus tres hijos, quienes según ella “son mis amores”, cada mañana hace sus diferentes guisados de bisteck, chicharrón, deshebrada, frijolitos, papas y sale a enfrentar la vida y a visitar a sus clientes, los cuales hay de todos.
Señala que se encuentra durante la venta diaria gente de toda, amable, prepotente, grosera, majadera, pero que en general la gente aquí en Delicias es buena, tan así que saca para mantener a sus tres hijos.
Menciona que ya son cinco años los que lleva vendiendo por estas calles de Dios. Viuda y madre soltera dijo con tristeza que dejó muchas solicitudes en varias partes, quedándole los encargados o patrones de hablarle, cosa que nunca sucedía, por lo que estaba desesperada, pues tenía tres niños que mantener: Samir Alexis de 4 años, Moisés de 8 y Ramsés de 12. Puros varoncitos.
Fue por recomendación de su señora madre, quien le comentó ¿Y por qué no vendes burritos? Ella le dio la idea y desde entonces vende en las calles del Centro de la ciudad.
Sale temprano, se pone sus tenis (pues tiene mucho que caminar) y primeramente Dios, se encomienda a él, pues es muy creyente.
Toma su hielera de rueditas y una bolsa térmica y a vender se ha dicho.
Con una cangurera en su cintura, sale a diario en busca primero que nada de “hacer la cruz” y si Dios quiere terminar su carga diaria.
El niño de 4 está en kínder, el de 8 en segundo de primaria y el de 12 en sexto, por lo que ya mero se gradúa, confiesa a este medio con orgullo.
Recuerda que tuvo su hijo más pequeño a los 27 años, por los que ya anda en los 31 de edad.
“Me puse a vender burritos, ya que vendía tamales, pero no me alcanzaba . De lunes a viernes vendo burritos y los sábados tamales, descansando el domingo y también le meto sandwichs”, menciona.
Para no tener problemas dijo que ya cuenta con su permiso municipal que le expidió el titular de Gobernación Jesús Raymundo Mata. Y muestra a este reportero el permiso debidamente enmicado.
“A mi nunca me ha dado vergüenza. Soy del poniente y de allá bajo a diario al Centro a vender”, dijo Maribel, quien se dirigió a todas las madres solteras y las invitó a que le echen ganas y luchen por lo que quieren.
jesusaguirre25@hotmail.com
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