Con tres partidos por disputarse en esta segunda fase del campeonato estatal de béisbol, el representativo de la tercera zona va por dos juegos para amarrar matemáticamente su pase a las semifinales y sin depender de otros resultados.
El problema de todo esto es que su rival en turno son los mazorqueros de Camargo, equipo que le juega al mil por ciento a algodoneros; ellos, los mazorqueros sí se la creen aquello de la famosa “guerra civil”, deportivamente hablando.
Para mi gusto, algunos jugadores de algodoneros todavía no les ha caido el veinte de que a Camargo hay que jugarles con todo, y lo digo con conocimiento de causa, pues he asisitido a algunos juegos entre Camargo y Delicias, y a la distancia, se ve que los de la novena zona le juegan a muerte a la tercera zona, mientras que para algunos jugadores naranjas, el encuentro es como un juego más; no se nota que saquen la casta, que den el extra en cada jugada.
Y es que históricamente, el conjunto de algodoneros tiene más rivalidad deportiva con otros equipos como los Mineros de Parral, los Dorados de Chihuahua, los Manzaneros de Cuahtémoc, los Indios de Juárez, etc. y a los mazorqueros se les ve como otro equipo más.
Pero creo que llego el momento en que las cosas deben cambiar; llego el momento en que algodoneros le juegue con todo a los mazorqueros; llego el momento de hacer valer la historia, y aunque suene a soberbia, hay que hacer valer esos trece campeonatos estatales ( siendo el máximo ganador de títulos desde 1957, la llamada época moderna del béisbol en Chihuahua) y otros tantos subcampeonatos, para de una buena vez caerle mal a dos que tres personas, jejejeje . No se crean, todos los demás equipos merecen todo mi respeto.
A falta de bateo oportuno, hay que hacer carreras , como sea: con toques de bola, con hits en runs, etc, el caso es ganar…
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