–EL TEATRO, LA UNIDAD DOLOROSAMENTE FRAGMENTADA II
–RAFAEL VELAZQUEZ RAMIREZ
–(ONASSIS)—
(Pronunciado, por este humilde servidor, durante la inauguración oficial del Taller de Teatro: “Alférez Real” y la presentación de la obra teatral “¿Quién lo mató?”, en el Teatro de Cámara del Centro de Documentación de Hgo. del Parral, Chihuahua el 14 de agosto del 2013).
El teatro es la terca custodia de una Luz para los hombres y para las mujeres… Para quienes lo hacen y para quienes lo presencian; para quienes lo escriben y quienes lo corporizan; para quienes lo pueblan de técnicas y de artes que sintetizan las tareas más nobles y bellas que los seres humanos han realizado.
Esa obstinada salvaguarda de la maravillosa e increíble Luz Teatral (únicamente contenida por el compromiso que adquirí para cristalizar el Proyecto Educativo Nacional, como maestro normalista), me orilló a crear varios talleres de teatro en diferentes ciudades del Estado de Chihuahua. Siendo los más entrañables, los que vieron la Luz en Delicias, Chihuahua…
Y cuando regresé, hace diez años, a esta mi Patria Chica, tierra provinciana: mi Parral (parafraseando al inmortal Alfonso Reyes); “Le dije a mi corazón: Ya llevas teatro para rato. Es tesoro y no se acaba. No se me acaba… ¡Y lo gasto!… Traigo tanto teatro adentro: que ya tanto teatro, me cansa…”
Fue por ello que hubo necesidad de compartirlo. Bajo la premisa de que El Teatro no puede desaparecer, porque es el único arte donde la humanidad se enfrenta a sí misma. Y porque el teatro es poesía, que se sale del libro para hacerse humana…
A finales del año pasado y durante la convalecencia de haberme roto una pierna (o, más bien, quebrado una pata), fui visitado y azuzado, con insistencia por el Profesor Oscar Corral, (Presidente de “Los Nuevos Villista A.C), mismo que bajo la proclama de “ya es hora de que vuelvas a hacer teatro”… Me dejó pensando en que, luego de diez años de afonía actoral, bien valía empezar a acariciar la idea de esa maravillosa posibilidad.
Con el decidido apoyo de mi esposa Betty, mi hijas, las gemelas Aracely y Arely, mi hermana América, mi sobrina Mireya y mi excelente amiga Nena Gutiérrez. Iniciamos con las audiciones para crear un taller de teatro, que viniera a paliar esa incesante, y agobiante, sed de compartir el arte escénico por excelencia… Como es natural, en una ciudad con profundas raíces culturales y artísticas, la convocatoria se constituyó en un éxito, y el municipio nos abrió un espacio en el Gimnasio Municipal (Gracias carnal Andrés). Más tarde, merced a los buenos oficios del ICHICULT, se nos permitió utilizar las instalaciones del Centro de Documentación, donde se imparten las clases de 8 de la mañana a 2 de la tarde, todos los domingos.
Así, con una férrea disciplina y basados en el Método de Constantín Stanislavsky, arrancaron las clases de preparación corporal, respiración, vocalización, dicción, improvisación, memorización, actuación, teoría teatral, conocimiento estructural de los teatros, ejercicios de confianza, creatividad teatral, maquillaje, vestuario, luces… Y aquello que inició como un grupo, evolucionó a un Taller. Mismo que tenía todo, menos un nombre… Por consenso entre los integrantes del taller, se decidió rendir honor al fundador de nuestra ciudad: Don Juan Rangel de Biesma. Y el Taller asumió, de manera respetuosa y formal, el título de: “Alférez Real”… Sin embargo el puro nombre no nos iba a proporcionar promoción ni formas de expresarnos públicamente… Fue entonces cuando, luego de una exhaustiva investigación, nació la obra: ¿Quién Lo Mató?.
La ley teatral de que el 90 % es de ensayo y el 10% de talento, se cumplió a cabalidad y la sana intención de seguir creciendo continua.
El interés, señoras y señores, es constituir un Movimiento Cultural completo, con clases de teatro, de oratoria, de declamación, de poesía, de literatura, en donde tengan cabida todas las expresiones que puedan surgir de una comunidad plural e incluyente, para lograr los espacios donde la expresión artística se genere y pueda darse a conocer… Es por ello que este Movimiento Cultural, pretende otorgarse a la ciudadanía sin costo alguno… Se preguntarán ustedes de el por qué las clase sean gratuitas?… La explicación es sencilla: Colocarle un precio a la cultura, es abaratarla; ponerla al mejor postor y hacer que pierda su creación en libertad…
Ese es el reto: Hacer surgir el Movimiento Cultural “Alférez Real”, como una alternativa viable para lograr la participación activa y propositiva, de todos aquellos que sienten el llamado a custodiar, cuidar y mantener viva la llama de la Luz y la Conciencia que el Razonamiento otorga…
Si, la cultura cuesta caro. Pero más caro cuesta ¡no tenerla!.
Se tiene la certeza y la certidumbre de que estamos sembrando en tierra fértil. En la tierra que fundó el Alférez Real Don Juan Rangel de Biesma.
Esa tierra fértil que todo lo da y nada pide. Esa tierra hermosa al natural. Esa tierra bendita que lleva por nombre: Hidalgo del Parral.
PD. Vamos a hacer teatro.
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