Pasaron ya 20 años desde que un sábado del mes de Septiembre la ciudad de Chihuahua amaneció con uno de sus más grandes desastres naturales.
El comandante de bomberos José Domínguez, advirtió que si no existe una cultura del respeto al sistema de drenaje pluvial natural es posible que se presente una tromba como la ocurrida hace dos décadas.
Según indicó el comandante, se puede igualar o superar los acontecimientos de hace dos décadas cuando unas cincuenta personas murieron a consecuencia de desbordamiento de arroyos debido a que se tenían en descuido los mismos y a la gran cantidad de agua que cayó esa noche de Septiembre.
Estos mismos hechos dejaron un registro de por lo menos otras 20 personas que jamás aparecieron tras el crecimiento y desbordamiento de arroyos la madrugada y mañana del 22 de Septiembre, de acuerdo a los datos periodísticos.
El comandante Domínguez, insistió en que se ha realizado un buen trabajo en cuanto a la limpieza y mantenimiento de los drenes pluviales naturales, sin embargo reiteró que existen personas que se empeñan en hacer caminos y tirar muebles sobre los mismo lo cual es grave en cuanto a la prevención de desastres naturales.
Sostuvo que es necesario evitar otro “sábado negro” como el que vivió Chihuahua hace 20 años.
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