Por Jesús C. Aguirre Maldonado (Texto y Foto)–
Delicias, Chih.- A pesar de ciertas trabas moralistas, celos de las esposas, y a que nadie quería “aventarse” por fin en diciembre del año 2007, hace ya casi ocho años (estamos a unos día del aniversario), se rompieron las barreras en Delicias, uno de los principales municipios de la entidad y por fin se permitió el acceso de las mujeres a las cantinas y hoy a ocho años de distancia, se ve con agrado que han cambiado muchas situaciones y ya la gente se hizo a la cultura de respetar a las féminas, señala el artífice de este importantísimo logro, Óscar Quiroz Guzmán, en aquel entonces jefe de Gobernación Municipal y quien mencionó que “lo que no está prohibido, está permitido”.
El hecho fue histórico y hoy se le recuerda con agrado, pues en ocasiones es necesario cambiar ciertas cosas en la sociedad y el que se haya permitido el acceso femenino vino a mejorar las ventas y a revivir los “cadáveres” en que prácticamente estaban convertidas las cantinas de la ciudad por las escasas ventas, ya que no es lo mismo ir a una cantina y verle la cara a otro hombre, que le sonría una mujer, que platiquen y que sobre todo esto se de en un marco de respeto, dijo Quiroz Guzmán.
Por su parte Don Armando López Hernández, ex presidente de la Unión de Propietarios de Cantinas de Delicias, y dueño de la cantina “Las Palmeras”, que se ubica sobre la avenida Agricultura y uno de los hombres que siempre luchó porque se aprobara esta medida, ya que los negocios del ramo estaban en aquellos años muy mal y “no se paraban ni las moscas”, además de que la gente que tomaba prefería comprar su botella, cervezas o seises e ir a tomárselas al Vado, bajo de unos árboles o en casa, mencionó que: “Luchamos durante veinte años para que las mujeres pudieran ingresar a las cantinas, y gracias a la administración municipal y al licenciado Óscar Quiroz Guzmán, ex titular de Gobernación, lo logramos”.
El propio López Hernández comentó en varias entrevistas con este reportero que en los últimos años las ventas en las cantinas estaban prácticamente “muertas”, ya que muy poca gente acudía, y ahora al permitirse la entrada a las mujeres las cosas han cambiado; se ve más movimiento, ahora hasta los hombres se comportan mejor al ver a una mujer tras la barra o al estar compartiendo una misma mesa con ellas, y “se ha creado la cultura del respeto hacia ellas”, aseguró.
No solo López, sino otros cantineros de la ciudad, de diversos bares coinciden en que en estos casi ocho años, a cumplirse en los próximos días, desde que se permitió la entrada a las cantinas a las mujeres no han tenido problemas, y en general los clientes han tomado con madurez este paso y les dan su lugar.
El problema era en aquella ocasión ¿cómo le iban a hacer para poner baños para las mujeres?, pues no los había, y algunas empezaron y dieron ese paso que en un principio fue un gasto, pero que después recuperarían, ya que las mujeres poco apoco fueron atrayendo clientela.
Desde entonces y hoy en día a casi ocho años de distancia a las mujeres se les recibe con cordialidad y se les ofrecen lugares higiénicos, con baños destinados para ellas, y se cuida que ninguna de las mujeres se dedique a fichar o a la prostitución, sólo a trabajar como meseras o cantineras, o bien como clientas, menciona Armando López.
Los integrantes de la Unión de Propietarios de Cantinas están muy agradecidos con el licenciado Óscar Quiroz Guzmán por el apoyo recibido desde entonces, ahora los negocios han prosperado y las mujeres ya no tienen necesidad de andar tomando a escondidas en lugares retirados de la mancha urbana y exponiéndose al peligro.
ÓSCAR QUIROZ GUZMÁN, EL ARTÍFICE DE ESTE LOGRO
“Cuando se acercaron los propietarios de la Unión de Cantineros de Delicias, me explicaron el problema que enfrentaban y el deseo de que se permitiera el ingreso de las mujeres a las cantinas, entonces yo les dije que lo que no está prohibido está permitido, así que vamos hacer todo lo posible para que entren sin ningún problema”, recuerda sobre dicha plática Quiroz Guzmán, pues siempre hay que dar el primer paso hacia el progreso o mejores condiciones.
NO SE ARREPIENTE DEL PASO DADO
Óscar Quiroz Guzmán, enfatiza que nadie quería aventarse a dar este importantísimo paso por cuestiones moralistas, ya que nadie quería ser el villano de la película, pero él se decidió y a casi ocho años de distancia de aquel logro no se arrepiente de haber dado luz verde, ya que esto está fundamentado en los Artículos 4 y 5 de la Constitución Mexicana, donde se dice que hombres y mujeres son iguales ante la Ley y que no se puede obstaculizar su trabajo, pues ellas, al igual que los hombres ante la ley, tienen libertad de elegir el que se desee, siempre y cuando sea honrado.
Menciona Quiroz Guzmán que “De acuerdo al artículo cuarto de nuestra Constitución Mexicana, se establece que la mujer y el hombre son iguales ante la Ley, con los mismos derechos y obligaciones, y por lo tanto, pues no había prohibición para que las mujeres entraran a las cantinas; si lo hacen los hombres las mujeres tienen el mismo derecho”, dijo.
Óscar Quiroz Guzmán, ex jefe de Gobernación Municipal y quien duró dos años en el cargo, destacó que en el artículo Quinto se establece: “A ninguna persona podrá impedírsele que se dedique a la profesión, industria, comercio, o trabajo, siendo éste lícito”.
Recuerda el entrevistado que “Prácticamente hace ocho años de que se tomó esa determinación (diciembre 2007) y creo que fue una buena decisión, ya que se salvaron muchos negocios y se crearon nuevas fuentes de empleo”, subrayó Quiroz Guzmán.
Añade que “Ahora las mujeres disfrutan del mismo derecho que los hombres, ya que nunca ha habido tal prohibición y no era posible que las mujeres desde hacía muchos años entraran a las cantinas de los municipios vecinos como Meoqui, Saucillo y Rosales, por citar algunos, y en Delicias, una ciudad mucho más grande y con mayor número de habitantes”.
Pero hoy en día a casi ocho años de aquello se le preguntó a Quiroz Guzmán si de presentarse la oportunidad de dirigir a los de su gremio le gustaría llegar a ser presidente de la Unión de Propietarios de Cantinas de Delicias, sin pensarlo dos veces, contestó que “me encantaría”.
Al consultársele el porque le gustaría, dijo que “porque conozco la situación que prevalece en el gremio y orgullosamente soy hijo de cantinero, de Salvador Quiroz, quien fue también presidente y pionero de la Unión en los primeros años.
Además como hijo de cantinero vivió la situación y los años difíciles para que su padre sacara adelante a él y a sus hermanos, lo mismo que otros propietarios que hacen lo mismo con sus familias, por lo que llegar a darse la oportunidad de estar al frente espera luchar por traer buenas cosas para el gremio. jesusaguirre25@hotmail.es
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