Por JESÚS C. AGUIRRE MALDONADO (Texto y fotos) —
Delicias, Chih. – Un ejército de monstruos y calaveras tomaron por asalto las calles de la Zona Centro de Delicias y Meoqui y algunos municipios de la Región Centro para pedir el clásico “jalogüín” en la Noche de Brujas, antes de la celebración mexicana del Día de Muertos y así poder disfrutar de los dulces y golosinas que les dan.
Como ya se ha hecho. Cada año, las calles se llenaron de seres terroríficos este miércoles 31 de octubre, por cientos de niños, jóvenes, adultos, y niños disfrazados de monstruos y personajes de películas de terror. negocios
Durante la tarde noche de este miércoles 31 de octubre Las calles, el centro de ambos municipios, pero mucho más en Delicias, payasos asesinos, momias, dráculas, brujas, diablos, superhéroes, muertes, y personajes de películas de terror como Fredy Kruger , dándose cita principalmente en la Tercera Norte, donde se hicieron largas filas a las afueras de los distintos comercios.
Varios negocios fueron arreglados para la ocasión y los empleados y dependientes también para disfrazar para atraer a la clientela, como fue el caso de un negocio de celulares y José María.
Las últimas noticias del sol. El ejército de los monstruos, las calles de Delicias y la región. Las calaveras, calabazas, bolsas de camiseta, o cualquier otra bolsa o bolsa para ir a los dulces y las golosinas. casa
El clásico grito de “queremos jalogüín”, el ejército de moustros se ha convertido en una calle pacífica, la Policía Municipal está en la calma total, como finalmente sucedió.
“Noche de brujas” o Halloween y recorrieron las calles de la ciudad y también se han dado cita en sus barrios al no poder ir al centro por no tener para el camión, dada la situación económica por la que atraviesa.
Cargar, hechizos, pintándose la cara, vendiendo como momias, colocando algunas prendas de color negro, ya que la canción era simple y sencillamente divertirse sanamente sin que esto se satanice.
“Los niños simplemente lo que querían eran dulces, y que en muchas casas no tenemos para comprarles. Comemos y pagamos los altos recibos de la luz, el agua, los pasajes para llevarlos a la escuela, uniformes, y no le ven la maldad. ”, Dijo una madre de familia de una colonia popular.
Como ya se ha hecho, la costumbre también se ha disfrazado de brujas, con los niños en los brazos, principalmente caracterizados de diablitos, draculitas o como pequeñas momias.
Por un par de horas niños y jóvenes tomaron por asalto las calles de la Zona Centro de Delicias y Meoqui, este último municipio donde son muy pocos los que salieron a pedir, y que una diferencia del vecino municipio, las puertas de los negocios cerraron muy temprano, mucho antes de la hora tradicional.
Pastel, palomitas, naranjas, cacahuates, frituras, chocolates, diversos dulces se entregaron a los niños, jóvenes y adultos, quienes llegaron a los negocios, donde se esperaban los comerciantes y los empleados para darles, formándose en algunos negocios. La cuadra completa.
Algunos negocios arreglarán la entrada por motivos propios de Halloween para que la gente se tome la foto del recuerdo.
Mientras que la policía municipal permanezca a la expectativa para controlar cualquier incidente que podría llegar a pasar, pero todo lo que se hace en un lugar tranquilo, ya que hay quienes acostumbran lanzar los huevos.
Caras pintadas de blanco, parejas, tríos o grupos de varios amigos y otros niños, incluso aún de los brazos, en los carriles.
Lo que pudo observarse y fusionarse con el anglosajón Halloween, importado de los Estados Unidos y el Día de los Muertos, también se han visto calaveras, catrinas, varios monstruos y hasta superhéroes.
Niños con disfraces muy reales como uno en la cabeza.
También te gusta. También te gusta. También te gusta. Lo que te gusta es lo que te gusta. Lo que te gusta. alguna sábana o vendas y con diseños de bolsas para la basura de color negro, con maquillaje de la hermana o de la mamá y en contra de algunos disfraces y pelucas de alguna boutique o centro comercial, disfraces caros, pues.
Hasta el cierre de la presente edición.
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