Crónica de un infarto en plena calle Tercera

Por Elias S. Rivas—

Delicias.- Esta mañana aproximadamente a las once de la mañana un hombre del cual se desconoce su edad y su identidad, sufrió un infarto y cayó al piso del interior de la Refresquería Delicias.

Durante unos minutos dos personas y yo estuvimos presenciando al hombre tirado al piso, y no llegaba nadie en su auxilio, al paso de estos minutos llegaron unos policías se acercaron al hombre, pero nada podían hacer, solo se concretaban a llamar por radio.
Posteriormente llegaron mas uniformados y lo mismo, nadie le proporcionaba los primeros auxilios, ni siquiera le tomaban los signos vitales. Así transcurría el tiempo y varias personas estuvimos haciendo llamadas de urgencia y nada, no llegaba ninguna ambulancia, al fin después de quince minutos llego la primera ambulancia, y descendió uno de los paramédicos con un maletín. Este se acercó al cuerpo y al tomarle los signos vitales se dio cuenta de que había que actuar de inmediato, y empezó a aplicarle la resucitación con aparatos eléctricos.

Posteriormente su compañero le aplicaba respiración artificial con una pequeña bomba, otro paramédico no cesaba de presionarle fuertemente el pecho, este ejercicio de apretarle el pecho fácilmente fue durante diez a quince minutos y la persona no reaccionaba, después llegaron otras dos ambulancias de la Cruz Roja, y bajaron una camilla para trasladar al afectado.

En entrevista con el paramédico, se nos informó, a preguntas directas, que tenían muy pocas ambulancias y que todas estaban muy ocupadas por eso la tardanza. Yo personalmente le pregunte como se encontraba la persona y me respondió que tenia fibrilización, a lo que yo le dije que nos hablara en términos más sencillos para comprenderlo mejor, y dijo; – El corazón del señor, está vivo pero sin latir, eso es, podemos decir que está muerto, a lo que le cuestione que como era posible eso, y el paramédico me explicó que al estar el corazón vivo pero sin latir, existían posibilidades de que se recuperara.

Al término de la entrevista el paramédico se retiró del lugar.

Hasta el momento no se sabe la situación en que se encuentra, solo sabemos que es muy grave.

La persona es de complexión muy robusta de unos 90 a 100 kilos de peso, y de unos 55 años de edad aproximadamente.

La céntrica calle se lleno de curiosos, a lo que los gendarmes invitaron a que se retiraran, es bueno aclarar que lo hicieron de buena manera.