En el recinto lo esperaban ya los 14 regidores que integran el H. Ayuntamiento, vestidos todos de manera informal, como en cualquier sesión de cabildo ordinaria, no la extraordinaria que sería la despedida al primer mandatario del Municipio de Delicias. Los catorce fueron llegando un poco antes de las 12 del mediodía de ese templadito jueves 4 de diciembre, Carreón con una chamarra deportiva, Valenciano con chaleco azul y camisa blanca, Bertha Tarango la mas formal con atuendo en blanco y negro, el resto vestidos de diario. La secretaria municipal, de acuerdo a la ocasión portaba un elegante conjunto de color claro.
Luego de saludar de mano a todos los ahí reunidos, medios de comunicación, funcionarios, regidores y uno que otro despistado, el edil tomó su sitio y con voz carente de emoción tomó la palabra para luego cederla a la secretaria, quien, luego de las formalidades protocolarias dió por iniciada la sesión extraordinaria que contemplaba como único punto someter a la consideración del ayuntamiento la solicitud de licencia del alcalde.
En algún rincón del recinto oficial alguien le susurró a otra persona en voz apenas audible: si, que se vaya, que se vaya. Al fondo alguien hablaba por teléfono atrayendo furibundas miradas del resto de los asistentes.
Luego de que los regidores en pleno autorizaran de forma unánime la solicitud de licencia del alcalde, algunos de ellos tomaron la palabra para desearle suerte en la nueva aventura por emprender “le deseo suerte pero le deseo mas suerte al candidato de mi partido” dijo Cristobal García arrancando con ello la risa de los asistentes.
Finalmente a las 12 con 34 minutos se dio por terminada la sesión y la concurrencia se retiró de prisa, como si todo mundo tuviera algo más importante que hacer. Un poco más tarde alguien –ya fuera de presidencia—saludó al alcalde con el clásico: Como está, a lo que este respondió con un indescifrable: Hasta hoy bien…. |
Últimos comentarios