Delicias, Chih.– El comandante Barrera ha sido sometido a varios estudios para determinar las causas de su enfermedad, ya que tiene un brazo que se le inchó de manera repentina, sufrió una parálisis facial, se le complicaron problemas en los pulmones, pero pese a ello sigue conservando su optimismo y las ganas de vivir.
Es una enfermedad de la que vamos a salir bien librados, confiando siempre en Dios, expresó el ingeniero Patricio Barrera, hombre bueno, hombre de fe, muy trabajador y honrado.
Justo cuando este reportero acudió de visita a la sala 20 del Hospital Regional donde se encuentra convaleciente el comandante Barrera, un médico lo visitó y confió en la fortaleza física y espiritual del paciente, a quien se le han realizado varios exámenes y se le realizarán otros más para determinar con precisión la causa de su enfermedad.
No lo dice, pero quienes lo conocemos, sabemos que el exceso de trabajo y su celo por hacer responder a cabalidad a las responsabilidades que se le han encomendado, Patricio Barrera también es presa del estrés.
Podria decirse, sin temor a equivocarnos, que es el funcionario de la actual administrador que más trabaja, que ofrece resultados y da seguridad a la comunidad. Por cierto, -hasta ahora- ninguno de sus compañeros de la administración municipal, ningún funcionario, lo han ido a visitar; aunque sí lo han hecho agentes de policía, de vialidad, sus compañeros de Protección Civil y los amigos que lo aprecian.
No olvidamos que un 22 de septiembre, hace más de 12 años, Barrera Juárez sufrió un atentado contra su vida y recuerda, hjoy como antes, que sus únicas armas fueron su gran fe en Dios y la Virgen de Guadalupe, pues es una persona sumamente católica, ya que fue un milagro haberse salvado, tras recibir en su cuerpo 14 balazos de AK-47, de las armas conocidas como “Cuerno de Chivo”.
Hoy, sus amigos y familiares esperan, esperamos, que el ingeniero Patricio Barrera Juárez se reponga de esta extraña enfermedad. Primero Dios.
Por Raúl Rivas
Últimos comentarios