Tuxtla Gutiérrez, Chis.- La Secretaría de Salud estatal reportó que en un año y medio clausuró más de mil establecimientos de bebidas embriagantes, de manera permanente, que no cumplían con la ley para operar en la entidad.
El titular de la dependencia, James Gómez Montes, indicó que algunos otros locales recibieron una suspensión temporal.
Aclaró que la Ley de Salud de estado establece los pasos a seguir, primero hay un apercibimiento, pero cuando incumplen “requisitos drásticos” se clausura de inmediato, aunque el dueño del local puede defenderse, pues “no hay avasallamiento”.
Lo que no es posible verificar son las condiciones del personal, si son o no chiapanecos, mexicanos o extranjeros, no actuamos como Instituto Nacional de Migración (INM), no vamos a preguntar de donde vienen, nos interesa la salubridad, detalló.
Se les advierte de los incumplimientos y si siguen infringiendo la ley se les multa, hay suspensión temporal y se llega hasta la clausura, destacó.
“Hallamos que muchos no pagaban impuestos, de un año y medio hacia atrás la verificación era responsabilidad de los ayuntamientos y Hacienda estatal tenía ingresos por cinco millones de pesos, el año pasado esos montos llegaron a 120 millones de pesos”, refirió.
Muchos ya están regularizados, “el cambio fue diametralmente en materia de recaudación, todos los impuestos se pagan en Hacienda como consecuencia del proceso de ordenamiento de restaurantes, cantinas, bares y demás centros de venta de bebidas embriagantes”, indicó.
Una vez que pagan derechos ante la Secretaría de Hacienda, cuando ya cumplen las condiciones de salubridad, se les expiden licencias, expuso.
Algunos establecimientos aún tienen las licencias municipales que se están en proceso de regularización para cumplir con las leyes General de Salud y Salud del estado, añadió.
Admitió que hay negocios que operan de manera irregular, “no se puede tapar el sol con un dedo”, pero ya son menos que en el pasado, pues 90 por ciento ya se regularizó.
En la entidad se tiene el registro de unos cinco mil establecimientos, y los municipios más grandes como Tapachula, Tuxtla Gutiérrez y Palenque son los que más negocios de este tipo tienen, comentó.
En algunos municipios más lejanos del centro del estado había muchos negocios que operaban al margen de la ley, en contraste el municipio indígena de Oxchuc es ejemplo porque no hay un solo local de bebidas embriagantes, gracias a un acuerdo municipal, resaltó.
Mientras que en los municipios fronterizos como Suchiate y Tapachula, entre otros, por supuesto que se genera una serie de situaciones difíciles de controlar, pero se aplica la ley y se cerraron más de 100 establecimientos, expuso.
En algunas operaciones participan la Procuraduría General de Justicia del Estado y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, dijo.
Todo ellos, recalcó, gracias a que hace un año y medio se devolvió a la Secretaría de Salud la facultad de hacer la verificación sanitaria de los establecimientos que venden bebidas alcohólicas, misma que antes estaba en manos de los ayuntamientos.
NOTICIAS/TRIBUNA CHIAPAS
Últimos comentarios