México, DF.- El presunto agresor de Salvador Cabañas continúa prófugo y la gente cercana al goleador del América se mantiene afligida. No se sienten seguros con el supuesto atacante libre.
José María González, representante del paraguayo, sentencia que “mientras este individuo no aparezca, no nos sentiremos seguros en México”.
El agente intenta no criticar la actuación de las autoridades mexicanas en este caso, pero la molestia lo traiciona y termina llevándolo hasta instancias más altas.
“Tal vez estén haciendo bien su trabajo y debemos respetarlo, pero queremos dejar esto en manos del gobierno y que hagan su trabajo en forma correcta”, apunta. “Es cuestión de que ellos trabajen mejor y nos tranquilicen de esa manera, que se hagan responsables de esto y ante cualquier situación adversa que ocurra, hacemos responsables al pueblo de México en nombre de su gobierno”.
El tema de la seguridad en el hospital Ángeles no es la mayor preocupación de González, ya que la vigilancia es extrema. Lo que le quita el sueño es lo que pudiera llegar a sucederle a la gente cercana al futbolista: padres, esposa e hijos.
Eso explica que se piense contratar seguridad privada para los allegados a Salvador. “Seguro que sí (contrataremos seguridad privada)”, revela. “Estamos haciendo lo posible por estar bien”.
La inseguridad reflejada por González tiene como argumento lo sorpresivo que resultó el atentado contra Cabañas. Le preocupa que se pueda repetir, por lo que estará tranquilo hasta que se confirme la detención de quien atacó al paraguayo.
“Evidentemente estamos más tranquilos por su salud, pero al mismo tiempo, porque esto no ocurra (la detención del JJ)”, explica. “Al no ocurrir, no sabemos de quién se trata. Estamos hablando de varias identificaciones de esta persona que atentó contra la vida de Salvador, por lo que la familia y todos nosotros, los que estamos a su lado, estamos preocupados por todo esto”.
“La situación es un poco preocupante. confiamos plenamente en el gobierno mexicano, al cual hacemos responsable de esta situación. Esto se ha convertido en una preocupación nacional y estaríamos bien contentos en la medida que el gobierno nos apoye”.
Al hacerse público el lugar donde el jugador está internado y en el que sus familiares están, González no descarta otro ataque.
“Desde el momento en que no encuentran a este individuo, tememos, no sabemos la intención de él, al haber hecho esto, evidentemente no es una persona que esté en sus cabales”, considera. “La situación amerita un mayor interés del gobierno mexicano para que esto se esclarezca y mientras tanto, esperamos tener mayor seguridad y que el gobierno asuma su responsabilidad”.
Sin embargo, González agradece la entereza del grupo de especialistas que atiende al goleador de las Águilas y la fe inquebrantable del pueblo azulcrema, el que mantiene la esperanza de que su ídolo saldrá adelante, por más que el representante le preocupe otro ataque.
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