El crimen ocurrió en Oklahoma durante la semana pasada, cuando cuatro adolescentes -de entre 15 y 17 años- observaron a Christopher Lane correr frente a una de sus casas.

Lane, originario de Australia, estudiaba en la East Central University en Estados Unidos pues contaba con una beca como beisbolista.

El día del asesinato, el beisbolista había salido a correr por el vecindario cuando cruzó por la vivienda de uno de los cuatro agresores; al verlo, los cuatro adolescentes decidieron matarlo pues estaban “aburridos”, señaló el jefe de la policía Danny Ford.

En la confesión de uno de ellos, indicó que otro de los agresores dijo “Ahí está nuestro blanco” pues “estábamos aburridos y no teníamos nada que hacer, por lo que decidimos matar a alguien”.

Varias personas que presenciaron el crimen acudieron a ayudar a Lane pero fue inútil debido a que perdió la vida a causa de la herida que sufrió.
Ford, el jefe de la policía agregó que por el momento no han localizado el arma con la que asesinaron al estudiante.

“Es desgarrador que haya sido una elección al azar hecha por estos chicos lo que alteró drásticamente tantas vidas en el proceso”, indicó Sarah Harper, la novia de la víctima.