Estamos en el 32.6 por ciento de votación del padrón general de votación en el estado, esta será la prueba de fuego para los partidos políticos y el Instituto Estatal Electoral, para saber si la sociedad chihuahuense decide participar en los comicios del me de julio.
Sin duda los esfuerzos para convencer al electorado deberán ser titánicos por quienes organizan las elecciones y los partidos políticos que deberán de enviar a sus mejores cartas, pero no bastara con ello, las promesas de campaña deberán de estar congruentes y diferentes a todos los años de gobierno que se han tenido en Chihuahua y lo primero será que quienes lleguen al poder tengan bien claro que a quienes deberán de tomar en cuenta para su trabajo deberá ser a la ciudadanía y olvidarse de sus orígenes partidistas.
Pues la sociedad pide agritos que se le atienda y que quienes están en el gobierno se dejen de cosas y su prioridad sea ordenar algunas cosas que son necesarias, como el hecho de que antes de tomar una decisión a nivel judicial, legislativo y ejecutivo se priorice la atención a las peticiones de los ciudadanos o de lo contrario el 32.6 por ciento de votación que dio a conocer el IFE en las elecciones del 2009 se ira en picada.
Muchos aspectos se deberán de cambiar en la forma de gobernar en primera instancia, los salarios de quienes trabajan en el gobierno y si no que le pregunten a los hombres y mujeres que son padres de familia y en seguida reducir el gasto corriente para que puedan convencer a quienes quieren gobernar.
El 4 de julio será un día crucial en la vida de la política chihuahuense y se espera que sea un ejemplo de civismo por estar en el año del Centenario de la Revolución Mexicana y el Bicentenario de la Independencia.
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