La importancia de las reglas de operación…por Aída María Holguín
-FRASEARIO
Con pañuelo blanco en mano, agitándolo en señal de victoria, el presidente Andrés Manuel López Obrador declaró el fin de la corrupción y el bandidaje oficial. Con ese ánimo victorioso y triunfalista, el presidente aisló el hecho de que casi el 65% de los recursos destinados a los programas sociales (de subsidios y transferencias) para el próximo año, carecen de reglas de operación.
Para comprender mejor el asunto, es importante saber que ‘reglas de operación’ se refiere al conjunto de disposiciones que sirven para precisar la forma en la que operan los programas gubernamentales, y que su diseño debe obedecer al propósito de lograr los niveles esperados de eficacia, eficiencia, equidad y transparencia.
Entonces, la importancia de las reglas de operación de los programas (ROP) no sólo radica en que éstas se constituyen en un instrumento para definir la población objetivo y conocer los apoyos específicos y los requisitos para obtenerlos, sino también para evaluar objetivamente los resultados y vigilar que los recursos públicos se apliquen de acuerdo a lo establecido. Es decir, las ROP no solo son una herramienta clave para medir la efectividad de los programas gubernamentales, sino también para para inhibir la corrupción, el bandidaje oficial y la opacidad en el uso de los recursos públicos destinados a dichos programas.
Considerando lo anterior, y que el presidente López Obrador le está apostando prácticamente todo a ciertos programas sociales, resulta alarmante que desde el año pasado no existan reglas para operar los programas ‘estandarte’ del gobierno de la 4T y que, para los que sí las hay, sean exiguas.
Cierto es que, como bien lo dijo el propio presidente López Obrador, “todos somos guardianes del presupuesto del pueblo” y hay que denunciar la corrupción si hay pruebas. El problema es que, sin reglas de operación, es prácticamente imposible tener las pruebas necesarias, válidas y suficientes para denunciar los casos de corrupción (presentes y futuros).
Sin duda alguna, las reglas de operación son mecanismo útil para frenar la opacidad y la corrupción. Es por eso que, tal y como lo expresó la organización México Evalúa, es muy preocupante “que el Presupuesto 2020 se haya redistribuido hacia nuevos programas sin ROP”. Preocupante por lo ya manifestado líneas arriba, y porque “es signo de que continuará la discrecionalidad y queda en entredicho la seriedad de la nueva política social”.
Finalizo en esta ocasión, citando lo dicho alguna vez por el músico y cantautor inglés, Andrew Eldritch: “El ciudadano se está convirtiendo en un peón en un juego en el que nadie conoce las reglas, donde todos dudan de que existan reglas, y donde el vocabulario se ha reducido de tal manera que nadie está seguro de qué se trata el juego”.
Aída María Holguín Baeza
laecita.wordpress.com
laecita@gmail.com
Últimos comentarios