Con todo respeto para los Soles de Ojinga, pero no era para que Algodoneros perdieran, ni siquiera uno ante ellos, pues si comparamos hombre por hombre, posición por posición, y sobre todo la nómina de uno y otro equipo, el representativo de la tercera zona debió haber ganado los tres, a como fuera, pero haber ganado los tres, y máxime que estaban jugando como locales.
Ahora si que en la novena naranja, si falla el pitcheo, funciona el bateo y viceversa, cosa que paso este pasado fin de semana, pues si analizamos los marcadores de los tres partidos ( 3-2, 4-3 y 4-3 ), los primeros dos con triunfos naranjas, se nota que la labor monticular mejoró bastante en relación a las pasadas semanas, y ahora quien falló fue el bateo, ya que da la impresión que algunos jugadores, entre ellos Octavio Armenta, el mismo Luis Eduardo García, el clasificado Miguel Inzunza, están muy por debajo de su nivel mostrado en pasadas temporadas.
Matemáticamente, el equipo de Algodoneros todavía se puede colar, y conseguir su calificación a los play offs, pues después de los terribles resultados conseguidos, luego de haber jugado 15 partdidos, de un total de 30, los dirigidos por Jaime Lara, se encuentran actualmente en el séptimo lugar, con un record de 6 ganados y 9 perdidos, sólo a un juego de distancia del sexto lugar, los Mazorqueros de Camargo , quienes tienen marca de 7 – 8 , y precisamente ambos conjuntos sostendrán 6 juegos a visita reciproca, en la séptima fecha, Algodoneros recibirá a Mazorqueros, y en la novena le estará pagando la visita.
Y si revisamos el rol que le queda a Algodoneros, de los 15 juegos restantes, necesitan ganar, por lo menos 11, y por lo pronto, este próximo fin de semana, van a visitar a los Faraones de Nuevo Casas Grandes, y mínimamente tienen que ganar la serie, y si es por limpia, mucho mejor, aunque todavía falta mucho para día de los Santos Inocentes, y bien dicen que la esperanza muere al último. Ahora sí que como dijo el ranchero: ” Somos algodoneros, ganenos o pierdanos “.
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