Por devoción a la Vírgen alimenta a los reos
—Por Jesús C. Aguirre Maldonado (Texto y Fotos)—
Delicias.- “No venimos a juzgar causas, ni a buscar culpables”, dijo doña Gonzalita Contreras viuda de Rodríguez, de 88 años de edad y quien tiene ya 12 años llevándoles comida a los presos del Centro de Readaptación Social (Cereso) de Delicias, al festejar este martes a Santa Eduwiges, su santa patrona, destacando que para ella es una gran satisfacción hacerlo, pues siempre ha sido muy católica y mientras Dios Nuestro Señor se lo permita, dándole vida y salud, aquí estará.
Dona Gonzalita, una señora de baja estatura, muy guapa, con un suéter negro, blusa morada y pantalón azul marino acompañada de su hija, , se dio cita como cada año desde hace 12 en la cárcel pública municipal, hoy Cereso, para cumplir con su encomienda.
Desde 1960 ella festeja a su santa patrona Santa Eduwiges, pues antes daba comida en su casa los indigentes, pues “esta virgen es muy milagrosa”, comenta al reportero. Ayuda a las causas difíciles y a los presos, destaca.
Menciona que Santa Eduwiges es una virgen muy milagrosa.
“Para mi significa mucho traerles comida a los presos como lo vengo haciendo desde hace con este 12 años”
Asegura: “No venimos a juzgar causas, ni a buscar culpables. Venimos a pasar un rato con ellos (con los presos) para que olviden lo pasado y vivan el presente”.
Menciona que en esta ocasión: “Ahí humildemente les traigo de comer asado, frijolitos, arroz, chocolate y refrescos, pues me doy mucho cuenta como viven, aquí. Son personas y el venir aquí para mi es algo muy grande”, dijo doña Gonzalita.
Aseguró que para ella es una gran satisfacción traerles de comer año tras año y “aquí estamos”.
Se dijo muy católica y que a Santa Eduwiges le ha pedido muchos favores, pues ella siempre fue comerciante. Iba a El Paso, Texas por mercancía y mientras los aduanales les quitaban a otras personas dinero de mordida o hasta la mercancía, a ella no le quitaban nada, recuerda la hija.
Asegura que mientras Dios se lo permita aquí estará trayéndoles comida a los presos.
Recuerda la primera vez que vino que fue en un mes de agosto y se dio cuenta como vivían los reos y después en la que ya fue la primera visita los internos quedaron muy agradecidos.
Durante la comida que se ofreció a los internos acudieron familiares de los presos y realizaron una celebración religiosa en honor de la virgen y convivieron con sus familiares.
Para finalizar, doña Gonzalita agradeció las facilidades brindadas por las autoridades penitenciarias, señalando que esto lo hace por devoción a la virgen y lo hace de todo corazón. jesusaguirre25@hotmail.com.
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