Los roedores son unos mamíferos que suelen causar cierto rechazo o miedo cuando los vemos, pese a que por lo general son pequeños (salvo una excepción de la que te hablaré más adelante). Piensen en cómo reaccionan algunas personas al enfrentarse a una rata o un ratón… generalmente no son muy queridos, ¿verdad? Pues bien, en realidad hay muchísimos más roedores que solo esos dos.
Por esto es que hoy te hablaremos de dos especies de roedores muy curiosas (y quizás más adorables): las ardillas voladoras y los capibaras, dos especies muy curiosas y adorables.
En el mundo existen alrededor de unas 2280 especies de roedores. Estos seres de sangre caliente (como todos los mamíferos), suelen tener el cuerpo recubierto de pelos y viven en todas las zonas del mundo, excepto en la Antártida.
Su característica más representativa son los incisivos, fuertes y esmaltados que utilizan para roer su alimento, maderas y cualquier cosa que puedan morder.
Su nombre científico es Pterominios, pero se les conoce mejor como ardillas voladoras. Hay 43 especies diferentes y la mayoría viven en América del norte y Europa del norte.
Realmente no vuelan, sino que planean. Saltan desde un árbol a otro y en el aire despliegan unas membranas que les permiten suspenderse y avanzar horizontalmente para hacer sus saltos más largos.
La aerodinámica de estas ardillas ha sido llevada al campo del paracaidismo y se han creado unos trajes aéreos especiales gracias a su anatomía.
Ya en los años 30 se pusieron alas a los paracaidistas para aumentar el vuelo horizontal, pero fue en los 90, gracias al paracaidista francés Patrick de Gayardon cuando se consiguió un traje seguro y eficiente. Gayardon murió probando una mejora en su traje, pero fue el padre de los trajes voladores.
Actualmente se pueden hacer largos vuelos gracias a estos trajes. Este año, el japonés Shin Ito, batió un record recorriendo 23.1 kilómetros en 5 minutos y 22 segundos, alcanzando una velocidad máxima de 363 km/h.
Me asombran los datos: El capibara es el mayor roedor y el más pesado de todos. Es originario de América del Sur. Su hábitat está siempre cerca de zonas con agua y se agrupa formando manadas integradas por varios individuos.
¿Qué es lo más interesante? Pueden llegar a pesar 60 kilos y medir, hasta el lomo, 60 centímetros. No sé si ves bien lo que digo, pero imagínate, un Beagle (un perro bastante normal en tamaño) pesa unos 16 kilos y mide unos 40 centímetros hasta el lomo. ¡Son ratones gigantes!
Como puedes imaginar tienen unas mandíbulas y unos dientes muy fuertes.
Por cierto, sólo se mueven durante el crepúsculo, el resto del tiempo lo pasan escondidos. Son herbívoros, viven en grupos y sus depredadores son las anacondas, caimanes, perros venaderos, jaguares y ocelotes.
En muchos países se consume su carne y se cazan también por su pelaje, muy preciado para la fabricación de vestimentas, por ejemplo en Argentina. En Venezuela su carne se utiliza para un plato tradicional al escabeche.
Pero no sólo se consumen, también hay quienes los crian en granjas. Incluso ya se tienen como mascotas. Se les considera limpios y cariñosos, y se les puede enseñar a sentarse, rodar, pedir la comida… ¡imagínate tener un super ratón en tu casa!
Creo que quiero uno para navidad.
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Cortesia oocientifico.com
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