Tenemos muy claro que sin la ciencia, los avances científicos, el propio pensamiento científico y todos los aspectos que se refieren a ella jamas concebiríamos la vida como se concibe hoy en día. ¿No lo crees así?
Sabemos cuán poderosa es la ciencia, confiamos en ella. Aquí mismo en OjoCientífico la amamos. Sin embargo, amigos, también sabemos que a lo largo de la historia de la humanidad, confundidos, sorprendidos y hasta asustados hemos acudido a la ciencia en busca de respuestas y hemos vuelto con las manos vacías.
La gran mayoría de las veces, esto nos genera aún más desconcierto e interrogantes pero sobre todas las cosas, nos genera curiosidad.
Sin más que agregar, hoy les presentamos algunas de ellas. Éstas son 10 de las cosas que la ciencia nunca pudo explicar.
Durante muchos años una cantidad de visitantes y habitantes de la pequeña y antigua localidad de Taos, Nuevo México han sido perturbados por un molesto sonido en el medio de la soledad del desierto. El sonido se caracteriza por una bajísima frecuencia, muy molesta y similar al zumbido de un insecto.
Tanto los habitantes como los visitantes y varios investigadores de las comunidades científicas cercanas han debatido durante años de qué se trata este extraño sonido.
Algunas de las hipótesis incluyen condiciones físicas anormales que forman un espacio acústico aún más anormal, otras que se trata de una histeria colectiva, un experimento siniestro o algo sobrenatural. Lo cierto es que nadie ha logrado determinar la existencia real de este sonido, su fuente o si es una invención.
Desde hace varias décadas se han reportado en distintas partes del mundo la existencia de criaturas anormales y bestias extrañas que escapan a una clasificación común o alguna que pueda figurar en cualquier enciclopedia.
Algunas de estas son Piegrande en los EEUU, el Chupacabras en México y otras zonas de América Latina y el Monstruo del lago Ness en Escocia, entre otras tantas. A pesar de que miles de personas en todos estos lugares han hecho denuncias, presentado fotografías y filmaciones de semejantes criaturas, todas ellas son sumamente cuestionables.
Por ello la comunidad científica jamás ha podido descifrar de qué se trata tan extraña situación. Quizás se trate de paranoia, histeria generalizada, falta de juicio, delirios, el afán por llamar la atención o cuestiones relacionadas a estrategias económicas, pero en la realidad nada explica certeramente qué es lo que lleva a tantas personas en tantas partes del mundo a afirmar la existencia de tales criaturas y la ciencia aún no ha podido determinar si existen o no.
La intuición, eso que comúnmente se considera como un “sexto sentido”, innegablemente todos y cada uno de nosotros la tiene. Todos hemos sentido una “corazonada” o una intuición sobre algo al menos una vez en la vida.
Claro que muchas veces nos equivocamos, pero ¿qué ocurre cuando acertamos? Puede que sea algo positivo y que al cumplirse nuestras expectativas o que ocurran las cosas como creíamos que ocurrirían sin ninguna razón para fundamentarlo nos contentemos, pero por otro lado puede ser al revés y que ocurra algo terrible que desgraciadamente ya creíamos antes que así pasaría.
Entonces se nos pone la piel de gallina y nos preguntamos cómo sabíamos que eso pasaría. Psicólogos y científicos de distintos ámbitos han estudiado la intuición durante años y si bien han declarado que el cerebro presenta cierto comportamiento extraño relacionado con la recolección de la información y la estimación de los acontecimientos, jamás se ha podido determinar algo concreto.
Todos sabemos que la gente desaparece, muere, deja de existir y demás. En la mayoría de los casos conocemos de qué se trata y puede ser por una fuga, un secuestro, un asesinato, un accidente, un extravío y un montón de situaciones similares pero otras veces la gente sencillamente desaparece sin dejar el mínimo indicio sobre lo que les ha sucedido.
Existen varios ejemplos de estas desapariciones misteriosas. Algunas de las más increíbles son por ejemplo las de barcos y tripulaciones enteras como la del Marie Celeste o cómo los casos de Jimmy Hoffa, Amelia Earhart y Natalee Holloway, entre otros y sobre todo en los tantísimos casos ocurridos en el llamado triángulo de las Bermudas.
En todos estos casos las personas desaparecen por absoluto y no se encuentra nada que permita al menos plantear una hipótesis. Sencillamente pareciera que el tiempo se detuviese y que las personas y hasta sus pertenencias materiales desaparecieran en un instante, sin dejar huella alguna para la ciencia.
Tal como ha ocurrido con las criaturas y las bestias extrañas, los fantasmas durante muchísimos años han aparecido en el folclore de muchos países, en relatos, cuentos, en las artes y en el testimonio de millones de personas en todo el mundo.
Desde obras como Macbeth de Shakespeare y poemas como Spirits of the Dead de E.A. Poe a shows de televisión como Medium de la NBC, los espectros, fantasmas o espíritus han figurado como algo existente pero cuya existencia parece imposible determinar.
Aunque mediante investigaciones de toda índole se pueda determinar cuándo se trata de un testimonio o de una prueba falsa, la ciencia por diferentes razones nunca ha podido determinar nada en concreto. Sin embargo sí se han registrado extrañas frecuencias sonoras que tampoco se han podido explicar y fuerzas físicas de las que es imposible determinar su fuente. ¿Qué es lo que puede llevar a la gente a sostener con firmeza y convicción tales existencias?
“Déjà vu” en francés significa “ya visto” y alude a la misteriosa sensación que seguramente al menos una vez en tu vida has experimentado de que algo ya lo has vivido antes.
Puede tratarse de una acción, una situación, entrar en un lugar, conocer a una persona o muchas cosas más, lo extraño es que por alguna razón inexplicable y aunque no logras recordar efectivamente cuándo o cómo, ya has vivido eso.
Es todo un enigma para la ciencia y durante años varios grupos de investigadores y psicólogos han estudiado e intentado descifrar este misterio, siempre sin resultados aceptables.
Los Objetos Voladores No Identificados son un hecho y su existencia es innegable. En realidad un OVNI puede ser cualquier cosa, desde un avión pequeño y no identificado a un asteroide. Precisamente se trata de algo que atraviesa los cielos, claramente visualizado, registrado y demás pero del que no se sabe qué es ni de dónde viene y justamente esto es lo más perturbador.
Durante muchos años se han registrado todo tipo de OVNIs y en la gran mayoría de los casos los avances científicos han logrado determinar con mayor o menor dificultad de qué se trataba finalmente.
Pero por otro lado aún hoy existen cientos de casos en los que jamás se ha logrado determinar qué eran esos objetos en los cielos, que incluso a veces han aparecido en grupos de más de una docena y moviéndose a velocidades nunca antes registradas.
Cientos de miles de personas que han tenido experiencias cercanas a la muerte han declarado un suceso común en todos ellos: generalmente se trata de un largo recorrido por un túnel oscuro muy iluminado al final, donde se encuentran con sus seres queridos y tienen un gran sentimiento de paz.
Algunos le suelen llamar “experiencia mística” y si bien son experiencias muy profundas y por lo tanto casi imposibles de analizar, nunca nadie ha regresado de tal experiencia con la mínima prueba que permita considerar el asunto seriamente.
De todos modos, la vida después de la muerte ha sido una espina que a lo largo de la historia de la humanidad nos ha puesto a pensar y pronosticar siempre sin resultado alguno. Las respuestas más comunes que la ciencia ha brindado ante estos sucesos se relacionan con delirios y alucinaciones provocadas por cerebros traumatizados y en shock tras accidentes graves.
Los poderes psíquicos, la percepción extrasensorial y la capacidad absoluta de la mente son otra de las cuestiones que la por distintas razones nunca han podido determinarse científicamente. Muchas personas creen que existe una conexión entre la intuición, los déjà vu y los poderes psíquicos o las percepciones extrasensoriales.
De todos modos la ciencia y varios investigadores han analizado a miles de personas que sostienen poseer poderes psíquicos y haber desarrollado más capacidades mentales que los demás, pero por alguna extraña razón, nunca funcionan ante hombres de ciencia.
Estas mismas personas sostienen que en presencia de escépticos o científicos sus poderes se opacan. Si es verdad que tal cosa ocurre. jamás podrá explicarse científicamente.
La ciencia jamás ha logrado descifrar por completo cómo se desarrolla y cómo funciona la extraña conexión entre el cuerpo y la mente. Se trata de algo real, que todos sabemos que sucede así pero también es algo que aún no ha podido explicarse, por eso lo hemos dejado para el final.
Entre los últimos 15 y 20 años la ciencia recién ha comenzado a poder entender algunos de los procesos más complejos que unen a nuestro cuerpo con la mente, por ejemplo en el caso del efecto placebo, cuando una persona puede sanar el cuerpo tan solo utilizando su mente convenciéndose de que está sanando.
Sin duda elijo éste como el mayor y más importante de los misterios que aún la ciencia no ha podido explicar. ¿Cómo la mente puede sanar al cuerpo con solo pensarlo?
¿Qué teorías podrías formular para explicar algunos de estos misterios?¿En qué crees que está fallando la ciencia y qué crees que hace falta para lograr explicar estas cosas? Anímate y cuéntanos tu opinión sobre estos enigmas de la ciencia, cuestionarlos puede ser el primer paso.
Cortesia ojocientidoc.com
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