Las fiestas de diciembrr

Por

Jesús José Meléndez Hermosillo.
Entren santos peregrinos, peregrinos, reciban este rincón….
Pedir posada era algo esencial en esta época del año…Que lindas eran las fiestas de diciembre, había mucho regocijo por doquiera…las calle con sus luces de colores…son cuadro de alergia y de placer…ambiente de armonía, plegarias de ilusión…las noches y los días palpita el corazón y luego las posadas con gritos de ilusión…que rompe la piñata, que pégale, que rómpela.
Y ya en la noche buena al niño hay que arrullar…que sirvan ya la cena el vino y lo demás…el pavo este relleno con pasas y acitrón y trozos de bondad del corazón…
Que emoción describir esto que ha quedado en el olvido, porque mucha gente dice que esto es anticuado, que es del pasado, que vivimos nuevos tiempos, tiempos modernos por los que estamos pagando un precio muy alto, nos hemos deshumanizado, los hemos hecho individualistas y materialistas.
Hemos dejado en el baúl de los recuerdos el respeto y las creencias tradicionales que nos mantenían unidos, que nos permitían tener lucidez para ayudar y que nos ayudaran cuando así se requiriera.
Estamos a cuatro días de la Noche Buena…tiempo suficiente para prepáranos y pasarla en familia adornar nuestras casa con imaginación pero sobre todo vivir esta época con intensidad pues tendremos que esperar para volver a ella nuevamente.
Los faroles, las ramas de mezquite que servían como árbol de navidad, los pequeños adobes hechos con lodo, el pozo que adornaba el nacimiento hecho de palitos de las paletas, lo caminos embardados con piedras recogidos de las calle y muchas cosas mas que daban la esencia a esta época, que en mi punto de vista muy personal se ha vuelto frio y con poco sentido.
La globalización es lo de hoy, tengo, valgo, no tengo no estoy a la moda y eso nos tiene ocupadas las neuronas de nuestro cerebro, ya no servimos porque nos nace, servimos para obtener algo a cambio y si no me lo cree haga consiente lo que está a su alrededor, pues todo gira en torno a un pago y no un favor, a un afecto a cambio de algo en fin.
Esta por acabar un año evalué como termina su conciencia como persona, tranquila o inquieta y prepárela para el nuevo año, pero primero vacíela de todo eso y que en el 2015 se llene de conductas y de actuares diversos que nos lleven a ser buenas personas, como hace ya muchas décadas cuando el valor de la sociedad era la convivencia y nos las condicionantes a los que estamos sometidos en estos tiempos modernos…volvamos a retomar la humanidad que nos caracterizó como sociedad en ataño.