Por Jesús C. Aguirre Maldonado (Texto y Fotos)—
Delicias.- Este miércoles 15 de abril, se cumplieron 58 años de la muerte del ídolo de ídolos Pedro Infante Cruz, quien falleciera en un accidente aéreo en Mérida, Yucatán el 15 de abril de 1957 y aquí en Delicias se le recuerda, y hay testimonios fotográficos de ello, porque estuvo presente en el año de 1956 con motivo de anunciar el famoso Brandy Dorado, ocasión que aprovechó el sinaloense para tener dos presentaciones en el salón Orquídea y en la plaza de Toros “Silverio Pérez” (Donde hoy es el Cinema Delicias).
La gente de Delicias recuerda que Pedro, que tenía los apodos de “El ídolo de Guamúchil”, “El ídolo de México” y “El Inmortal”, era muy sencillo y que las jóvenes de la época se arremolinaban en torno a él, al grado de que una de ellas le lastimó la placa que tenía en la frente, pues antes de su muerte ya había tenido otro percance aéreo, donde se la colocaron.
Los recuerdos que quedan son la foto donde se ve al intérprete de “Amorcito corazón”, “Viva mi desgracia”, “Sobre las olas”, “El muchacho alegre” y tantas otras, fallecido a los 39 años de edad con casi 5 meses (pues nació el 18 de noviembre de 1917 y falleció el 15 de abril de 1957) empuñando en su diestra el famoso brandy deliciense y en la otra una copa.
Esta foto aparece en uno de los libros “Delicias, imágenes del tiempo”, del escritor ballezano avecindado en Delicias, Carlos Gallegos Pérez y también la tienen en dos tres cantinas, una de ellas a un costado de los Transportes Chihuahuenses y la otra en un conocido negocio de sombreros y texanas de la zona centro.
Hay vestigios de la visita de Pedro, nacido en Mazatlán, Sinaloa el 18 de noviembre de 1917 a Delicias e incluso puede verse en el recién inaugurado Museo de Sito “Huellas de nuestros pasos”, un calendario de 1960, que imprimió Bodegas Delicias, para sus clientes más distinguidos y en donde se puede apreciar al ídolo de ídolos anunciando el Brandy Dorado.
Pedro Infante Cruz fue un actor cinematográfico y cantante mexicano, integrante sin lugar a dudas de la llamada “Época de oro” del cine mexicano.
A pesar de haber nacido en Mazatlán, Sinaloa, según mencionan sus biógrafos, edad muy temprana se trasladó con su familia a Guamúchil, donde adquirió algunas nociones de música y fue en sus primeros años aprendiz de carpintero, papel desempeñado a la perfección en películas como “Pepe El Toro”, “Nosotros los pobres” y “Ustedes los ricos”.
En su estado natal, Sinaloa, Pedro fue también miembro de un conjunto musical que actuaba en la localidad de Guasave y en 1939, una emisora de radio local, la XEB, permitió al que pronto se convertiría en ídolo, iniciar modestamente su carrera como cantante hasta que, en 1943, consiguió grabar su primer disco, “Mañana”, cuyo relativo éxito fue el primero de su brillante carrera y supuso que su nombre comenzara a ser conocido por el gran público que siempre se entregó a él en dondequiera que se presentaba.
Según los ríos de tinta que se utilizaron durante su larga carrera y posterior muerte, para hablar del ídolo, Pedro Infante Cruz llegó a grabar más de trescientas canciones que siguen gozando de gran popularidad en toda Latinoamérica, donde su muerte, en un accidente de aviación acaecido en las proximidades de Mérida, Yucatán, en 1957, provocó un dolor y una estupefacción semejantes a los que rodearon la desaparición de los míticos Rodolfo Valentino y Carlos Gardel.
Tras sus primeras incursiones en la pantalla grande, Pedro Infante iniciaría su carrera de actor que le supusieron un éxito inmediato, por la que comenzaron a lloverle las ofertas, convirtiéndose muy pronto en el galán y cantante favorito del cine nacional, en donde destacó su calidad interpretativa de papeles en los que encarnaba personajes de charro-hombre del campo, muy diestro en el manejo del caballo que viste un traje especial compuesto de pantalones ajustados y chaquetilla, acompañado del característico sombrero ancho, de copa puntiaguda-, varoniles y mujeriegos, así como su ejemplar personificación de la gentes humildes, con sus oficios, que le valieron fuera elevado a la categoría de ídolo popular.
También aquí en Delicias hay varias fotos de Pedro y lo mismo aparece en bares, restaurantes, peluquerías, mercados y donde puede apreciarse en varias carteleras de sus películas es con Manuel González, en Flautas y Flautas, donde están prácticamente “tapizadas” las paredes de la Época de oro del cine mexicano, en donde participó el ídolo de Guamúchil.
Y sin faltar está también El Borrego de Oro de Meoqui, donde la dueña del negocio tiene de igual manera adornadas las paredes con fotos del ídolo sinaloenses, que lo mismo porta con gallardía el traje de charro, el de oficial de tránsito o el de galán.
A 58 años de su muerte, Pedro Infante no ha muerto, vive en el corazón y mente de todos los mexicanos. jesusaguirre25@hotmail.es
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