Delicias.- El Departamento de Prevención de Delito de la Dirección de Seguridad Pública Municipal resolvió de manera completa, el caso de dos ancianos que vivía en condiciones infrahumanas y logró que fueran atendidos tanto en el Hospital Regional como en el Asilo Juan Pablo Segundo.
A partir de una llamada recibida en un medio de comunicación el día 8 de agosto, las promotoras comunitarias, coordinadas por Prevención del Delito y por Atención a Víctimas Especiales, ambas de Seguridad Pública Municipal, acudieron al domicilio de los señores Dionisio Tercero Morales, y Carlos Tercero Morales, de 91 y 74 años respectivamente, quienes residían en la calle 5 de Febrero No. 7, de la Colonia Loma de Pérez en condiciones infrahumanas e inhabitables.
Una vez que llegaron a la casa y verificaron la situación deplorable, acudieron a Atención Ciudadana con el señor Raúl Botello, quien se comunicó con la responsable del Asilo Juan Pablo Segundo, la licenciada Rosario Mercado Ávila, para gestionar la residencia de los dos ancianitos. La licenciada Mercado los acompañó a la casa de los señores Tercero, para establecer el primer contacto.
Una vez que fueron visitados, se trasladaron en una unidad de Seguridad Pública Municipal, al Hospital Regional para que recibieran atención médica, puesto que, debido a la inhabitabilidad del domicilio se encontraban expuestos a muy malas condiciones de salubridad, además de las deficiencias nutricionales y de salud derivadas.
El Hospital Regional atendió médicamente a Dionisio y a Carlitos, gracias a las gestiones del DIF Municipal, dirigidas por la señora Ivonne Licón de Mata, y previo estudio del departamento de Trabajo Social. Los médicos especificaron que se encontraban en aparentes medianas condiciones, sin embargo sí requerían de alimentación adecuada, además es preciso mencionar que Carlitos había sido atropellado años atrás y conservaba secuelas de incapacidad motriz leve.
Durante cuatro horas, fueron atendidos por personal de Hospital, valorados por urgencias, consultados y se les proporcionó medicamento para el resfriado y para menguar una infección ocular de Carlitos.
Después de su estancia en el Regional fueron trasladados, una vez más por Seguridad Pública, al Asilo Juan Pablo Segundo, alrededor de las 7 de la tarde, donde los recibió formalmente la licenciada Mercado.
Carlitos y Dionisio llegaron, por fin, a su nuevo destino, con muestras notables de alegría y gratitud, incluso Dionisio dijo. “Dios se acordó de nosotros”.
El nuevo programa de Promoción Comunitaria de Seguridad Pública está dando resultados tangibles de inmediato, es decir, las promotoras, realizan gestiones ante diversas dependencias municipales, estatales o federales, así como asociaciones, si fuera el caso, para resolver asuntos de la sociedad civil enclavada en situaciones de vulnerabilidad.
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