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Ya no pesa Oribe Peralta

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  • El delantero del América sumaría su peor racha sin gol en cinco años
  • Peralta no sabe lo que es anotarle ni a Pumas ni a Chivas con la camiseta azulcrema

El nivel de Oribe Peralta con América se apaga partido a partido y la cuota de goles se ha desplomado para amargura de sus seguidores y de un equipo que está urgido de anotaciones si quiere mantenerse con vida en el presente semestre.

En el presente torneo, el delantero del América ya suma siete partidos en fila sin marcar con las Águilas, incluidos los tres que van de Liguilla, y solo registra un gol en los últimos 11 duelos de las Águilas, por lo que su producción goleadora va en picada, argumento que no fue suficiente para que Ignacio Ambriz lo considerara para iniciar la Ida de Semifinales ante Pumas en lugar de Darío Benedetto.

De no anotar el próximo domingo en Ciudad Universitaria, Oribe llegaría a ocho partidos sin marcar, racha que no tiene desde el Apertura 2010 cuando jugaba en Santos y estaba lejos del nivel que lo llevó a jugar los Olímpicos de Londres 2012 y el Mundial de Brasil 2014.

Con la playera azulcrema, Peralta ha marcado 22 goles en tres torneos, mismos en los que ha jugado 55 partidos para un total de 4 mil 921 minutos.

Eso se traduce en que el delantero marca cada 223 minutos en promedio, más o menos cada 5 tiempos de 45 minutos anota un gol por lo que su producción no es tan alentadora para lo que necesitan las Águilas y más tras su caída en la recta final del año.

SIN PESAR EN CLÁSICOS NI EN LIGUILLAS

Aunado a eso, Oribe Peralta parece no estar hecho para los Clásicos pues en tres torneos que lleva con América solo le ha podido marcar a Cruz Azul, y tanto Chivas como Pumas han sabido anularlo por lo que no ha aparecido en los partidos importantes o que tiene más relevancia para la afición azulcrema.

Incluso, las Liguillas parecen no ser el mejor aliado del “Hermoso” con América pues en 11 partidos que hasta el momento ha jugado en tres fases finales con las Águilas solo ha anotado en dos ocasiones, una de ellas en la Final del Apertura 2014 ante Tigres cuando ya el marcador estaba 2-0 a favor y el rival con tres hombres menos.

Hoy más que nunca los americanistas anhelan el despertar de Oribe Peralta, pues las Águilas necesitan cuando menos cuatro goles para pensar en mantenerse con vida en el torneo por lo que tanto Benedetto como el propio “24” azulcrema tendrán gran parte de la responsabilidad en sus pies.

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