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En el nombre del Cielo…por Rafael Velázquez Ramírez

—EN EL NOMBRE DEL CIELO—

( Y… ¡las puertas se abrieron! )

RAFAEL VELAZQUEZ RAMIREZ

(ONASSIS)

            Atardecer único de la Capital Mundial, marco perfecto para el escenario sin igual del evento más esperanzador que pueda existir: Parral, El Centro Cultural “Palacio Alvarado” y su ya tradicional Posada…

            En punto de la seis de la tarde, y cuidando todos los detalles, las majestuosas puertas de nuestro Palacio Alvarado, se abrieron de par en par para recibir a toda la ciudadanía: Hombres, mujeres, niños, pobres, ricos, feos, bonitos, peinados, despeinados y un que otro calvo, fueron recibidos con los brazos y los corazones abiertos, para llevar a cabo el recordatorio ancestral y perenne de que todos somos iguales; como iguales son las hojas de los árboles, el polen perfumado de las rosas, las profundas miradas de los niños, las estrellas que titilan en los cielos: Iguales todos, ¡como el punto primigenio de la creación!…

            ¡Hay fiesta en el cielo! Los corazones de los asistentes lo gritan ufanos, lo gritan alegres con su vario son… Reíd fuerte ¡más fuerte!, corazones de mi ciudad…

            Siendo como fue, es y será, un evento de convivencia ciudadana, el agradecimiento a la asistencia se hizo general ponderando la presencia, la prestancia, el apoyo y, sobre todo, el desprendimiento, de todas las personas que participaron de manera altruista y desinteresada para el mayor lucimiento del ágape.

            ¡La fiesta estaba en su apogeo!… Los chicos corrían y pasaban, los oídos de las personas presentes se deleitaban con la agradable música del grupo perteneciente al Jardín del Abuelo, bajo la batuta del siempre romántico y sobrio señor Marrufo. Entre tanto las hermanas de la Misericordia del Sagrado Corazón, esperaban ansiosas el momento de su participación. Parecían un maravilloso grupo de avecillas a las que lleva uno agua por las mañanas, desbordando alegría e hiperactividad hermosa.

            Mientras tanto, a las afueras del Palacio se organizaba la tradicional peregrinación. Se invitó a todos los que así lo creyeran conveniente a participar en el recorrido, para visitar las casas adyacentes al Palacio que amablemente se prestaron para el efecto. Quienes no quisimos darnos una enfriada, nos quedamos a escuchar a las hermanas y a los cantantes del jardín del Abuelo.

¡ENTREN SANTOS PEREGRINOS!

            Y el milagro de la bondad se realizó…

            Todos, absolutamente todos, procedimos a arremangarnos las mangas y a repartir el dulce bocado que sabe mucho mejor cuando se da, que cuando se recibe… Santo maná surgido del más glorioso cielo: El Compartido…

            El tiempo no solo se detuvo, retrocedió… La milagrería de la risa alegre de los niños constituyó un regalo más de la bondad. Las ventanillas que hace un siglo, se abrían para otorgar al menesteroso  la parte compartida de Don Pedro Alvarado, hoy rebosaron en ricos dulces, surgidos de las dadivosas manos parralense para la chiquillería…

            No hay duda: Todo cabe en Parral, sabiéndolo acomodar.

            En esa maravillosa velada hubo de todo: risas, canciones, dulces, poesías, abrazos, sonrisas, hermandad… Solo faltó una cosa, y que bueno que falto, El Egoísmo… Y digo que qué bueno que faltó porque hubiera traído a sus amigos: La envidia, la habladuría, la cizaña y el rencor… Ellos brillaron por su ausencia… ¡Y qué bueno! Los parralenses no los necesitamos.

            Lo que siempre necesitaremos son personas trabajadoras, incluyentes, serviciales, colaboradoras e inteligentes. Capaces de realizar milagros como el del pan y los peces, multiplicando lo poco por lo mucho para abrigarnos a todos… Gracias, muchas gracias, y la promesa de seguir participando por el bien comunal, para el administrador, director y responsable de nuestro Centro Cultural Palacio Alvarado, el amigo, compañero y hermano: Martín Marquez. Adelante, siempre: ADELANTE!!!

PD. La fiesta sigue, si el inteligente lector y la bella y pachanguera lectorcita no asisten, es porque no quieren… TODOS ESTAMOS INVITADOS!!!.

 

            

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